El alcalde de Solsona, el republicano David Rodríguez, ha asegurado este martes que el alboroto levantado por el carnaval de su ciudad puede obedecer a un intento de desprestigiar el proceso soberanista de Catalunya.

Lo ha dicho en declaraciones a Europa Press, un día después de que Fiscalía de Lleida acordara incoar diligencias de investigación penal por el carnaval de Solsona y en la misma jornada en la que el PP ha presentado una denuncia por el vídeo en el que se puede ver como el Rey Carnaval dispara contra un grupo de que representa al Ejército español.

También este martes el Ayuntamiento ha hecho público un comunicado en el que asegura que no es justo que desde determinados sectores se haya orquestado esta campaña de "demonización de la celebración para atacar nuevamente el independentismo y el proceso catalán".

"Todo hace que seamos víctimas de un grave perjuicio contra la honorabilidad de la ciudad de Solsona y sus vecinos, a los cuales esperamos que se acabe reparando", afirma el comunicado.

El Ayuntamiento sostiene que el consistorio de la ciudad no interviene en la organización de la fiesta y, en este sentido, desconoce con antelación el guión de los actos de su programa, motivo para el cual cree que está exento de cualquier responsabilidad.

Según el Consistorio, la estética de la llegada del Rey Carnaval fue desafortunada, al igual que las declaraciones pronunciadas a título particular por algunas personas entrevistadas pero, a pesar de ello —reza el comunicado—, el Ayuntamiento defiende que la Asociación de Fiestas del Carnaval nunca tuvo ningún ánimo ofensivo en su organización.

El comunicado precisa que el alcalde se ha reunido con miembros de la junta de la Asociación de Fiestas, y ha contactado con representantes del Partido Popular para aclarar la situación y desvincularla de ninguna intencionalidad maliciosa.

En su comunicado el alcalde denuncia la falta de profesionalidad y la tendenciosidad de algunos medios de comunicación que, en su opinión, desde el sábado han difundido las informaciones sin contrastar y sin haber hablado ni con el Ayuntamiento ni con la organización.

"Se ha considerado verídico un cartel falso con un mensaje absolutamente condenable el origen y la autoría del cual se desconoce, y que ha circulado para las redes sociales una vez finalizada la fiesta", ha considerado.