La Cámara de Comercio considera que el consumo y la inversión muestran signos de "reactivación"

La Cámara de Comercio de Murcia ha considerado que, a pesar de la acumulación de tasas negativas en el IPC, la Región no se encuentra en una situación de deflación estructural, ya que el consumo y la inversión "no solo no se resienten, sino que muestran signos de reactivación".

La Cámara de Comercio de Murcia ha considerado que, a pesar de la acumulación de tasas negativas en el IPC, la Región no se encuentra en una situación de deflación estructural, ya que el consumo y la inversión "no solo no se resienten, sino que muestran signos de reactivación".

Así, el índice de ventas del comercio al por menor aumentó un 2,1 por ciento en 2014, el primer avance después de seis descensos anuales consecutivos, según informaron fuentes de la institución cameral en un comunicado.

La inflación negativa, por lo tanto, "está haciendo notar sus efectos positivos en la renta disponible para las familias, que ven aumentar su capacidad adquisitiva". Por su parte, los menores costes de producción para las empresas "también producen una ganancia de competitividad en los mercados exteriores".

A su juicio, esta situación "podría mantenerse durante los próximos meses, con la intensidad que resulte de la evolución de los precios del petróleo".

El Índice de Precios al Consumo en la Región de Murcia (IPC) durante enero registró una variación del -1,9 por ciento, repitiendo la tendencia bajista habitual del primer mes del año.

De esta manera, y por octavo mes consecutivo, los precios descienden en la Región, con una tasa interanual del -1,6 por ciento, tres décimas por debajo de la media nacional (-1,3 por ciento) y un nivel desconocido en la serie histórica del IPC regional (ver gráfico).

La caída de los precios del petróleo sigue siendo el factor determinante de esta evolución, con sus efectos directos en carburantes y combustibles, tal y como demuestra el descenso de un 5,9 por ciento en sus precios durante enero, tras seis meses consecutivos de abaratamiento. Esto, a su vez, ha tenido su reflejo en el grupo de transporte, que el paso mes bajó un 3 por ciento.

Asimismo, durante enero, tradicionalmente también se produce una significativa bajada en vestido y calzado, como consecuencia de las rebajas de invierno, un -16,9 por ciento en este caso. En menor medida, se anotan descensos en las actividades relacionadas con ocio y cultura (-2,3), especialmente por la menor contratación de viajes organizados, y menaje (-0,9).

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