Las autoridades panameñas han extraditado recientemente a España a un presunto narcotraficante de nacionalidad colombiana que fue arrestado en el país centroamericano para que sea juzgado en la Audiencia Provincial de Alicante por introducir supuestamente un alijo de 203 kilos de cocaína ocultos en contenedores de piñas, según han informado a Europa Press fuentes judiciales.

La detención y posterior extradición es el resultado de una orden internacional de busca y captura cursada por el tribunal de la sección segunda de la Audiencia a través de Interpol. La sala está a la espera ahora de saber si otro implicado en los hechos, declarado en rebeldía como el anterior, sigue preso en Francia para poder juzgar a ambos en una misma vista oral.

Por esta causa ya fueron condenados en enero del pasado año otros siete narcotraficantes a sendas penas de ocho años de cárcel y el pago de multas de casi siete millones de euros. Esa sentencia ha sido confirmada íntegramente por otra dictada por el Tribunal Supremo hace unas semanas que desestima los recursos de casación interpuestos por los abogados defensores.

El alijo fue incautado por agentes del Grupo de Respuesta Especial contra el Crimen Organizado (Greco)-Levante II el 1 de abril de 2011 en una nave industrial de la ciudad toledana de Talavera de la Reina, al término de una investigación que se había iniciado en octubre de 2010 y que incluyó seguimientos, vigilancias e intervenciones de los teléfonos móviles de los implicados.

La operación se saldó con una docena de arrestos. Solo diez de los implicados fueron juzgados por la Audiencia Provincial de Alicante, pues los otros dos, que fueron apresados en un hotel de Madrid, adonde habían llegado procedentes de Costa Rica, se fugaron tiempo después tras quedar en libertad y tuvieron que ser declarados rebeldes.

La investigación policial reveló que los narcotraficantes habían introducido la droga en España procedente de Costa Rica entre un cargamento de piñas, a través del puerto de Valencia, gracias a la información que les facilitó un antiguo transitario de esa terminal. Éste fue absuelto por la sala, al igual que otros dos sospechosos que participaron en la descarga la fruta. Los magistrados dictaminaron que desconocían que hubiera droga en los contenedores.

Dos empresas

Los narcotraficantes utilizaron la empresa Exportfruit Global de Centroamérica para exportar el alijo por mar y otra mercantil, Eurozona Levante SL, con domicilio en la localidad alicantina de La Nucia, como importadora.

El Tribunal Supremo ha remitido hace unos días a la Audiencia de Alicante la sentencia de casación que confirma íntegramente las penas de ochos años de cárcel y multas de 6.933.348 euros, por lo que la sección segunda de la institución judicial provincial puede ejecutar ya el fallo.

En la sentencia de casación, a la que ha tenido acceso Europa Press, el Supremo valida la intervención de los teléfonos móviles de los narcos al considerar que era "no solamente funcional sino necesaria y, desde luego, proporcionada, a la importancia del delito objeto de investigación".

Asimismo, descarta que se haya producido una vulneración del derecho a la presunción de inocencia y a la tutela judicial efectiva porque los magistrados de la Audiencia ponderaron razonadamente todas las pruebas de cargo existentes en el sumario, desde las conversaciones telefónicas, con un "calculado lenguaje críptico de finalidad claramente encubridora", hasta los documentos portuarios y empresariales intervenidos.