La Junta de Andalucía prevé que las obras del tramo del metro de Málaga hasta el centro de la capital se inicien después de Semana Santa, una vez que las obras han sido adjudicadas a la Unión Temporal de Empresas (UTE) formada por Acciona y Sando, según el anuncio realizado por la consejera de Fomento y Vivienda, María Jesús Serrano.

Los trabajos de infraestructura, montaje de vía y urbanización del tramo Guadalmedina-Atarazanas han sido adjudicados por 26,62 millones de euros, lo que supone una baja del 40 por ciento respecto al presupuesto de licitación, de 44,66 millones.

Las obras tendrán una duración de 28 meses por lo que, si no ocurre nada fuera de lo previsto, concluirán a finales de 2017. Esta adjudicación, ha asegurado Serrano, "garantiza la llegada del metro al centro histórico, turístico y comercial de la capital".

Una vez realizado este trámite, se prevé que el contrato se formalice en mes y medio; la orden de inicio de los trabajos se otorgará a finales de marzo y se iniciarán a principios del mes de abril. La UTE ha tenido el máximo valor técnico y económico, ha apuntado, y ha incidido en que tendrá que atenerse a lo que incluye el pliego de licitación.

A este concurso se presentaron las principales constructoras españolas y andaluzas, ha resaltado la consejera. El plazo de recepción de ofertas se cerró el 15 de septiembre pasado con 13 firmas interesadas, de las cuales se seleccionaron nueve una vez eliminadas las ofertas insuficientes.

El anterior equipo responsable de la Consejería de Fomento y Vivienda, de IU, mostró sus dudas por el porcentaje de baja que había en las ofertas admitidas, por lo que se pidió un informe sobre si se podía suspender el proceso o, de lo contrario, continuar. Es precisamente esto lo que se ha realizado teniendo en cuenta, según Serrano, que se atiene a la normativa vigente.

De esta manera, el consejo rector de la Agencia de Obra Pública de Andalucía ha decidido esta adjudicación atendiendo a que cuenta con la máxima valoración, ha indicado Serrano, quien ha apuntado que el Ministerio de Fomento está adjudicando a empresas con bajas del 50 por ciento. "La oferta está dentro de la legalidad y cumplía los requisitos del pliego", ha apostillado.

La titular andaluza de Fomento ha apuntado que los técnicos y responsables de supervisar las obras "pondrán toda su profesionalidad y buen hacer en que se cumpla estrictamente lo que viene en el pliego, en el contrato y en el proyecto". "No atenderemos a ninguna otra cuestión que no sea aquella que surjan de alguna circunstancia sobrevenida que por las características de la obra no hubiera estado prevista ni en el proyecto ni en el contrato", ha dicho.

"Cuando tienes unas reglas de juego, puestas en el pliego de licitación por el anterior equipo directivo, ahora te tienes que atener a esas reglas. Lo contrario, si resolvemos sin cumplir la normativa, incurriríamos en inseguridad jurídica y en responsabilidad con los licitantes y agentes económicos implicados, e incluso con la propia sociedad de Málaga", ha sostenido.

La adjudicación del tramo Guadalmedina-Atarazanas "se inscribe en la solución final consensuada entre la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento de Málaga para culminar la red de metro". Así, consiste en el acceso soterrado al centro histórico, a través del mencionado tramo, y la prolongación, principalmente en superficie, de la Línea 2 desde la estación Guadalmedina hasta el Hospital Civil-Materno, actualmente en fase de información pública y ambiental.

La consejera ha afirmado que se está ultimando una carta para solicitar formalmente una reunión con el Ayuntamiento de Málaga para abordar las obras aún pendientes, así como la depuradora norte de la capital. "Tenemos que casar las agendas", ha dicho, añadiendo, no obstante, que a otros niveles se están manteniendo reuniones "y seguiremos trabajando con diálogo y lealtad institucional por encima de todo".

Respecto al tramo en superficie hasta el Hospital Civil, Serrano ha indicado que está pendiente la evaluación ambiental y analizando las alegaciones que se han presentado. La voluntad, ha incidido, es "dar celeridad a todo el proceso".

"El nuevo equipo directivo, que lleva dos semanas, está decidido a mantener los plazos y hacer realidad los tramos. La convocatoria de elecciones autonómicas no frenará el ritmo de gestión; no nos vamos a distraer ni un solo minuto en cuestiones menores", ha recalcado en rueda de prensa en Málaga.

El trazado puesto en servicio comercial el pasado 30 de julio de 2014 equivale al 81 por ciento de la red prevista, y el 19 por ciento restante se corresponde al tramo en ejecución, entre El Perchel-Guadalmedina, y su prolongación hasta el centro histórico, con la estación Atarazanas, y hacia la zona norte de la ciudad, junto al Hospital Civil.

En este sentido, cuando se pongan los tres tramos pendientes, el metro dará servicio a más de 20 millones de usuarios al año. Sólo la estación en Torregorda y la llegada al centro hospitalario suponen "más del 36 por ciento de la demanda total, unos 7,5 millones de viajeros", ha aclarado.

CARACTERÍSTICAS

El trazado cuenta con 295 metros lineales y se desarrollará íntegramente de forma subterránea. Cuenta con una única estación, en la intersección entre la calle Torregorda y la Alameda Principal.

El punto de partida del trazado, común a las líneas 1 y 2 del metro de Málaga, se encuentra en el puente de Tetuán sobre el río Guadalmedina, donde concluye el tramo El Perchel-Guadalmedina, actualmente en fase de construcción y que da continuidad a las líneas 1 y 2, puestas en servicio el pasado 30 de julio hasta el intercambiador El Perchel-María Zambrano.

Según la Junta, el túnel discurrirá bajo el tablero norte el puente de Tetuán, lo que convertirá esta infraestructura en una de las actuaciones singulares de esta obra, consistente en la demolición y posterior reconstrucción de dicha estructura de paso. Una vez cruzado el río Guadalmedina, el trazado continúa por la calzada norte de la Alameda principal hasta la confluencia con calle Torregorda, donde se ejecutará el recinto que albergará la futura estación.

El sistema constructivo que se empleará, de acuerdo al proyecto, es el mismo que se ha utilizado en el resto del trazado subterráneo, el denominado muros-pantalla, que tendrán una cota de profundidad de hasta 37 metros con respecto al nivel de calle para albergar en un futuro, si así lo determina el Ministerio de Fomento, la prolongación de la línea del ferrocarril de cercanías Málaga-Fuengirola hasta la plaza de la Marina.

Esta cota de las pantallas permitirá albergar un tercer nivel para el futuro túnel del Cercanías, ya que el segundo nivel es el habilitado para el túnel del metro y el primero la zona de vestíbulo de la estación. El ancho entre pantallas, de 8,5 metros, también se adecuará para un futuro encaje del túnel de Cercanías.

El proyecto también contempla medidas para evitar la afección a los ficus centenarios de la Alameda Principal, situados en el lateral norte de dicho espacio, por donde discurre la traza del metro hasta Torregorda. En concreto, las pantallas del túnel se separarán un mínimo de siete metros del tronco de los árboles y la rasante se ha profundizado para dejar pasar el flujo de agua freática.

Respecto a la estación de Atarazanas, dispondrá de una boca de acceso a la altura de la calle Torregorda, dotada, como el resto de estaciones subterráneas, de escaleras fijas y mecánicas, que se complementarán con el edificio del ascensor.

Otro elemento fundamental, ha precisado el Gobierno andaluz, es la urbanización que se llevará a cabo en el lateral norte de la Alameda Principal, una vez restituido el viario, ya que se abordará la peatonalización de la calzada norte de esta vía.