La candidata del PA a la Alcaldía de Córdoba, Lola de Toro, ha criticado este martes que "los despropósitos con Pérez Giménez no cesan", en relación con el despido tácito de los últimos 23 trabajadores de la farmacéutica cordobesa en concurso de acreedores que aún seguían en plantilla, pues "han recibido una comunicación oficial de que están de baja (de la Seguridad Social) desde el pasado 22 de diciembre".

Según ha explicado De Toro en un comunicado, "esta sorpresiva situación choca con el auto" del pasado 8 de enero del titular del Juzgado de lo Mercantil número uno de Córdoba, Fernando Caballero, quien acordó "un ERE", para 123 de los 147 empleados de los laboratorios, "dejando al parecer fuera del mismo a un número coincidente de trabajadores con los dados de baja, con lo que se da la situación paradójica de que, entre los afectados por el ERE y los despedidos tácitamente a través de esas bajas en la Seguridad Social, Pérez Giménez se queda sin ningún trabajador que continúe la actividad mientras se resuelven los procesos judiciales abiertos en torno al concurso".

Para De Toro, "aunque los administradores concursales hayan manifestado que se han producido esas 23 bajas por un error de la gestoría, se da la lamentable situación de que legalmente están conceptuadas como despidos tácitos, que, además, al superar en número los permitidos para despidos individuales y tener la condición de colectivos, adolecen de nulidad", con lo que se obliga "a los afectados, caso de no ser subsanado el error administrativo, a interponer demandas por despido".

En opinión de la candidata andalucista, "no deja de ser llamativa la situación creada, pues en el caso de que la Audiencia Provincial de Córdoba resolviera que la subasta en la que se adjudicó Pérez Giménez a Globalaeronautic fué correcta, ocurriría que la mencionada firma adjudicataria se encontraría controlando una empresa desierta de personal laboral".

Por último, De Toro ha dicho dudar "que esos 23 despidos respondan a un mero error administrativo" y sospecha la candidata andalucista "que responden más bien a los deseos de dejar una empresa libre de cualquier carga social heredable por la adjudicataria".