La concejal de Educación, Cultura y Deportes del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, María Isabel García Bolta, ha afirmado que se está negociando y manteniendo reuniones con los vecinos mientras llega la decisión judicial al recurso de apelación presentado contra el auto que suspende cautelarmente los actos lúdico-nocturnos —mogollones— de las fiestas.

"En todo momento nos hemos guiado por la legislación actual, que es de 2013 [la Ley de Actividades Clasificadas], y hemos planteado, y así se lo hemos hecho ver a los vecinos, unas medidas correctoras distintas a las del año pasado", dijo la edil durante una rueda de prensa para presentar el pregón carnavalero del próximo 31 de enero.

García Bolta esperó así que el trámite jurídico del recurso presentado por el Ayuntamiento se pueda resolver antes de la primera noche del Carnaval e hizo especial hincapié en que se sigue negociando con los vecinos "porque nos preocupa no sólo las noches de Carnaval, sino también los vecinos del entorno".

"De ahí —añadió— que no nos hayamos salido ni un ápice de lo que la legislación contempla y que este año hayamos redoblado las medidas correctoras en todas las zonas del intercambiado".

Los vecinos admiten las galas,

Pero no lo mogollones

Asimismo, la concejal apuntó que los vecinos admiten las galas y los concursos en el escenario de Santa Catalina, pero no los conciertos ni la celebración de los mogollones en la parte de atrás del parque —la zona del intercambiador— por la noche.

Expuso que el Consistorio capitalino ha seguido instalando los chiringuitos porque entiende que la resolución de los tribunales al recurso presentado puede ser favorable a los intereses municipales y matizó que lo que la Institución no puede hacer es improvisar.

"Les hemos puesto de manifiesto [a los vecinos] cuáles son las medidas que afectan a la redistribución del espacio donde se van a colocar los chiringuitos, que es distinta a la del año anterior, incluso usamos como pantalla el edificio Elder y hemos situado en la parte del fondo los grupos de estudiantes", dijo.

De esta manera, García Bolta expuso que en las proximidades a los vecinos sólo están ubicados los profesionales —como los restaurantes— con el objetivo de que el sonido "baje considerablemente". Además, agregó que se cuenta con unos aparatos de sonido que harán mediciones durante la noche.

"siguen deseando que nos marchemos de esa zona"

"Ellos —continuó— parece que las medidas de luz y sonido las veían bien, pero siguen deseando que nosotros nos marchemos de esa zona, algo que el Ayuntamiento no contempla en este momento".

La concejal insistió en que ambas partes continuarán negociando y que, al mismo tiempo, se está a la espera de lo que digan los juzgados al recurso municipal.

"Estamos en esa primera fase y parece que hay un cierto acercamiento, pero los días transcurren. En principio celebraremos con toda tranquilidad el pregón y las murgas. Tenemos todavía un margen para seguir negociando", concluyó.