El equipo de Gobierno presupuestó 200.000 euros en 2007 para redactar el proyecto, del que se comenzó a hablar en 1996. La empresa elegida tiene seis meses para entregar el documento en el que deben proponer, además, ideas para potenciar el uso cultural y recreativo de los 8.500 m2 de Gibralfaro con un auditorio al aire libre.

Y es que el gran objetivo del funicular, el primero de Andalucía, es integrar la fortaleza en el circuito cultural y turístico del centro histórico y, al mismo tiempo, preservar el parque forestal de Gibralfaro de la agresión que sufre con el tránsito permanente de coches. De hecho, se plantea quitar el tráfico, salvo el bus turístico y el 35 de la EMT.

En papel desde abril de 2001

En 1996 se empezó a hablar del funicular y en abril de 2001 se materializó en papel. Según un informe actualizado en 2006 y que sirve de base para el concurso, la inversión del funicular no pasaría de siete millones de euros que se amortizarían a corto plazo. El informe incluye un estudio geotécnico de Cemosa de 2002 que asegura que la construcción de túneles no supone problemas técnicos ni tampoco ocasionaría un impacto ambiental de entidad.