La consejera de Hacienda y Administración Pública, María Jesús Montero, ha anunciado que 2014 se cerrará con un resultado de déficit de en torno al uno por ciento, "a pesar de que este último ejercicio no se establecieron objetivos diferenciados" para cada comunidad autónoma.

En un almuerzo informativo organizado por Foro Joly, Montero, a favor de los términos del llamado 'Plan Juncker', se ha mostrado contraria a "rebajas impositivas cosméticas", que, a su juicio, "no son mejores para los ciudadanos ni son políticas que ayuden a la redistribución del gasto".

"Plantear una mal llamada reforma fiscal en las puertas de unas elecciones no es serio; no se puede estar jugando con la recaudación para ver si cuadran o no las cuentas, poniendo rebajas fiscales como gancho electoral", ha añadido la consejera quien, por otro lado, ha descartado la implantación del impuesto de grandes superficies en Andalucía.

Asimismo, la consejera ha anunciado que se está ultimando un sistema de indicadores de calidad de los servicios públicos con vistas a que la Administración "sea accesible e innovadora", puesto que "sin empleados públicos y sin los ciudadanos no seremos capaces de dar con la tecla" en esa renovación de los servicios públicos.

La consejera ha ofrecido una serie de datos, de forma que apunta que Andalucía "ha cumplido con el objetivo de déficit en 2013", mientras que en 2014 "pese a la existencia de dificultades mayores", el resultado estará en torno al uno por ciento "pese a que no se establecieron objetivos diferenciados".

Ha agregado que en Andalucía "estamos menos endeudados que el resto de España" y ha asegurado que en la comunidad "pagamos mejor a los proveedores que la media, a pesar de las dificultades", de forma que resalta que "el compromiso adquirido por la presidenta se cumple".

"Andalucía es una comunidad cumplidora, hemos sido legales", ha aseverado la consejera, quien ha exigido "rectificación del Gobierno por el maltrato a las comunidades autónomas", citando el "nuevo agravio" que supone los 426 millones de euros de la liquidación negativa del ejercicio 2013, donde reiteró su petición de fraccionamiento del pago.

Ha lamentado que esa negativa a fraccionar el pago supondrá "menor crecimiento del PIB y del empleo y mayor dificultad para alcanzar la convergencia en términos de renta; es una situación injusta y contraria al espíritu de la Constitución, que trae una brecha entre las comunidades y nos lleva a un modelo dual".

Cambio de ciclo

La consejera, que ha considerado que "van a cambiar de forma definitiva las reglas del juego, lo cual debe suponer "una oportunidad para Andalucía y España", ha resaltado que los últimos informes "señalan que la economía de Andalucía ha recuperado el crecimiento en el año que ha terminado y se acelerará en 2015, llegando incluso al entorno del dos por ciento, porcentaje compatible con la creación de empleo".

Este cambio de ciclo "puede ser una oportunidad para avanzar hacia un nuevo desarrollo de modelo económico, un nuevo marco de relaciones laborales, económicas y financiera o bien nos podríamos dirigir a una sociedad dual con brecha de desigualdad creciente entre personas y territorios ricos y pobres".

Considera que Andalucía "se juega mucho en las decisiones de los próximos meses", por lo que ha valorado la oportunidad que supone el Plan Juncker y considera que "empieza a ser un clamor y se pretende una ofensiva de inversión para fomentar el crecimiento y el empleo". "En el futuro de la economía europea, Andalucía tiene tanto que ganar si la nueva propuesta se impone, por lo que debemos estar presentes con voz alta en este escenario", asevera.

Lamenta que el Gobierno del PP "ha traído mayor concentración de poder en el Estado, desplegando una batería de medidas que suponen una involución del estado del Bienestar, siendo España el segundo país con más desigualdad del conjunto de Europa", a raíz de "una legislatura caracterizada por el retroceso y la involución del Estado autonómico".

Por ello, ha lamentado la actitud "injusta y desleal del Gobierno central", que "nos ha obligado a seguir una senda de reducción del déficit desequilibrada", aunque recuerda que Andalucía "ha efectuado el esfuerzo requerido".

Tras reiterar su crítica al sistema de financiación autonómica, ha valorado la puesta en marcha del Fondo de Liquidez Autonómica (FLA), aunque ha recordado que "tenía un carácter extraordinario, temporal, limitado y voluntario", mientras el nuevo decreto ley que supone reestructuración de los fondos, "un giro radical, donde los fondos tienen vocación de continuidad, amplían su alcance, y además lo hace extensivo al conjunto de comunidades".

En ese sentido, advierte de que en esa modificación "hay mucha letra pequeña" y la idea de Estado que subyace "hurta a las comunidades la capacidad básica de decidir, modificando leyes orgánicas y sin informar de esas modificaciones en el Consejo de Política Fiscal y Financiera; además de penalizar a las mal financiadas".

En ese punto, considera que Andalucía "tiene una situación peculiar, pues somos cumplidores pero estamos acogidos al FLA; se nos debería permitir el acceso a unas condiciones más favorables, pero no es así". Considera que esa situación "afecta a Andalucía casi en exclusiva y es un nuevo agravio".

En materia de empleo, la consejera ha resaltado que "ocho de cada diez nuevas afiliaciones en España durante la segunda mitad de 2014 se ha producido en Andalucía" y ha apuntado el hecho de que "desde su acceso a la autonomía, en Andalucía se ha producido una intensa incorporación de activos al mercado laboral, de forma que entre 1981 y 2013 la población activa se ha duplicado, muy por encima que el resto de comunidades".

"Andalucía ha creado más empleo ene este período que el que se ha creado en el resto del país", asevera Montero, quien ante las expectativas de que haría falta una década para recuperar niveles de empleo anteriores a la crisis, considera que "no podemos conformarnos con esperar diez años, porque creo que tenemos alternativa".

Modernización de administración pública

También ha aludido a la "necesaria modernización de la Administración pública" y a que se quiere "una administración ágil, eficaz y moderna, con participación ciudadana, avanzando en la ingeniería de procesos administrativos, evaluando las políticas públicas e introduciendo mayores controles sobre el uso de los fondos públicos". Esta modernización "es una exigencia democrática a lo que todos tenemos que dar respuesta", aunque reconoce que "vamos tarde".

Considera que "hay que ser imaginativos, arriesgados, poner todas las castañas en el asador para una colaboración abierta de toda la sociedad", tras lo que ha anunciado que se está ultimando un sistema de indicadores de calidad de los servicios públicos, con vistas a que la Administración "sea accesible e innovadora", puesto que "sin empleados públicos y sin los ciudadanos no seremos capaces de dar con la tecla" en esa renovación de los servicios públicos.

Caso ere

Por otro lado, preguntada por la gestión que ha efectuado la Junta de casos judiciales como el de los ERE, la consejera considera que "siempre se pueden hacer más cosas", aunque cree que "la hoja de ruta que este Gobierno ha seguido intachable, se ha cogido el toro por los cuernos y la Junta ha asumido mayores responsabilidades políticas que el que hemos visto en el panorama nacional". "La Junta ha tenido una reacción medida y proporcionada a su responsabilidad", ha aseverado Montero, que agrega que "hay un control exhaustivo de cada euro que entrega a la Junta; algo que debe combinar con el hecho de que la administración sea ágil, eficiente y no llegue a procedimientos interminables.