El teniente de alcalde de Urbanismo y Vivienda, Jesús Valls, ha informado este lunes que el Consejo de Gerencia de Urbanismo ha acordado por unanimidad denegar al Casino Teatro Balear la solicitud de licencia.

Además, se han desestimado los efectos del silencio positivo y se ha dado conocimiento a Disciplina Urbanística de esta resolución para que resuelva la suspensión de las obras que el Casino Bingo Balear ha estado realizando hasta la fecha amparándose en el silencio positivo de Cort.

Valls, quien ha realizado un repaso a las actuaciones de esta entidad y que han llevado a Cort a tomar estas medidas, ha recordado que Bingo Balear ganó el concurso del Govern para la instalación de un casino en el centro de Palma, si bien las cláusulas especificaban que el adjudicatario debería obtener las licencias urbanísticas pertinentes de Cort.

Así, el Ayuntamiento de Palma denegó la licencia puesto que no se tuvo en consideración "la legalidad vigente debido a los incumplimientos incluidos en la ordenanza de usos del centro histórico, especialmente en lo que hace referencia a que no existía colidancia de viviendas, que la propiedad no disponía de un parking en el interior del edificio que no se pueden conceder licencias nuevas de mayor de 300 metros en aplicación de esta ordenanza".

El teniente de alcalde ha indicado que esta denegación de licencia fue recurrida con petición de medidas cautelares, que fueron denegadas por parte del Tribunal. Paralelamente, Gran Casino pidió licencia de obras para acondicionamiento de los interiores, una licencia que le fue concedida.

"No conformes con la situación y a la luz de la ley 7/13 de Actividades, esta entidad procede el 23 de junio a registrar una nueva solicitud de licencia, prevaliéndose de la licencia que consta en vigor, una licencia que está en vigor, pero fuera de ordenación", ha informado Valls.

El regidor ha justificado la denegación de la licencia destacando que lo que pretende la entidad con el nuevo proyecto "es un aumento del aforo que llegaría a 1.180 personas, incrementar la superficie de uso público hasta 1.406 metros, añadir actividades complementarias a la actividad del juego, realizar nuevas instalaciones y aumentar la carga de fuego y la presión acústica en el interior. Todas estas variaciones conllevan obligatoriamente solicitar una nueva licencia, y no solo una mera variación de la licencia anterior".

Valls ha indicado que Casino Balear alega que el uso del Plan General es recreativo y que la Ley 7/13 permite realizar alternativas técnicas por lo que existe una contradicción entre el PGOU y la Ordenanza de Usos del Centro Histórico donde debe prevalecer el Plan General.

En este sentido, "el criterio del Ayuntamiento de Palma siempre ha sido que las ordenanzas están en vigor y forman parte del mismo cuerpo del Plan General que las especifican y complementan. Esta duda jurídica es lo que ha provocado que no se haya resuelto el silencio positivo antes de que finalizase el plazo estipulado".

En este punto, el teniente de alcalde ha indicado que "el letrado de Gerencia emitió en su día dos informes admitiendo las alegaciones presentadas por Casino Balear, informes contra el criterio de los servicios jurídicos y otras áreas, por lo que nos encontramos que hasta el 29 de diciembre no podemos obtener el informe definitivo del Letrado Jefe de los Servicios Jurídicos de Cort que corrobora que las ordenanzas son de aplicación por lo que no existe contradicción y lo que procede es denegar la licencia".

El motivo de que no se ha resuelto en plazo es que "no se contaban con los informe jurídicos, coherentes con los informes técnicos que han traído hoy la resolución expresa de la administración. El 14 de noviembre, los celadores visitaron la obra no pudiendo acceder a la misma, cosa que se realiza el l 9 de enero donde se comprueba que se han realizado, posiblemente, obras más allá de lo autorizado por el Govern", ha explicado.

Así, una vez tenido conocimiento cierto de que las obras se están realizando pertenecen al nuevo proyecto presentado contrario a Derecho, es por lo que se da traslado a Disciplina Urbanística para que proceda a la suspensión de las obras dado que el Ayuntamiento considera que el silencio positivo no opera al ser una licencia arrogada 'contra legem', ha concluido.