El Defensor del Pueblo Andaluz ha abierto dos quejas de oficio, dirigidas a la Consejería de Igualdad, Salud y Políticas Sociales, por la muerte de dos pacientes en la salas de espera de urgencias del Hospital de Jerez (Cádiz) y del Hospital Juan Ramón Jiménez de Huelva.

En el texto de la queja por lo sucedido en Jerez, consultados por Europa Press, la Institución apunta que ha tenido conocimiento "a través de los medios de comunicación" del fallecimiento de un paciente en la sala de espera del servicio de urgencias del citado hospital en la noche del pasado 5 de enero.

Al parecer, y según señala, su derivación a dicha sala se produjo "por falta de espacio en las dedicadas a tratamiento y observación del referido servicio, que por lo visto cuentan con 13 y 28 puestos respectivamente", toda vez que se alude a la existencia de una segunda sala de tratamientos que "permanecía cerrada, al igual que algunas áreas de la planta de hospitalización (urología y otorrinolaringología)".

Así, el Defensor del Pueblo señala que el afectado, enfermo de cáncer, "falleció en la sala de espera ante los ojos de los demás enfermos que allí se encontraban, sin un mínimo de intimidad, y en un contexto se saturación del servicio de urgencias del centro que, según las mismas fuentes, ha venido sucediéndose durante todo el período navideño".

En términos similares se pronuncia la Oficina del Defensor en su queja por lo ocurrido en el Hospital Juan Ramón Jiménez, suceso del que la Defensoría ha tenido también conocimiento por los medios de comunicación, que, indica, "señalan que la paciente acudió a dicho servicio en la mañana del sábado 10 de enero, al parecer por una fractura de cadera, y el fallecimiento se produjo a las 19,00 horas del domingo, después de permanecer un tiempo considerable —algunos medios hablan de diez horas y otros incluso de 20— en espera de ingreso hospitalario, el cual no llegó a completarse".

Precisamente, continúa el texto de la queja "a la hora de proceder a dicho ingreso se desencadenó por lo visto una situación sobrevenida, la cual se atribuye a su proceso de salud y a su avanzada edad, que determinó su muerte".

Además, el Defensor indica que las noticias señalan este suceso "como detonante de la apertura de nuevos espacios para la hospitalización, que hasta entonces permanecían cerrados, tras la llamada efectuada por el jefe de guardia al director médico del centro, lo que permitió el ingreso de otros pacientes que se encontraban en la misma ubicación".

Al mismo tiempo, prosigue, "se vierten detalles relacionados con la elevada presión asistencial del servicio —200 personas atendidas en la tarde del domingo y 40 ingresos ese día—, aunque las declaraciones de responsables del centro que aparecen recogidas, niegan relación entre lo acontecido y una presumible situación de colapso de la unidad asistencial".

Por tanto, y en ambos casos, las quejas apuntan que para investigar las circunstancias de estos sucesos, la Institución ha iniciado un expediente de queja de oficio a las gerencias de ambos hospitales, solicitándole "datos explicativos de los itinerario asistenciales de los pacientes en los servicios de urgencias, con indicación de tiempos y asistencia proporcionada —consulta de antecedentes, exploración, y pruebas indicadas—, así como la decisión terapéutica adoptada, y las indicaciones de los motivos concretos de las muertes.

Además, ha requerido información sobre las "circunstancias que determinaron la derivación a la sala de espera de pacientes de un enfermo de estas características", datos relacionados con la frecuentación del servicio de urgencias y dotación de personal sanitario en cada una de sus áreas en el período navideño, e información sobre los parámetros o ratios de actividad que determinan la apertura de la segunda sala de tratamientos, así como la de las áreas de hospitalización cerradas para favorecer el acceso a las mismas de los pacientes pendientes de ingreso.