España comprará este verano sus primeros misiles Tomahawk, según el diario El País.

En total serán 24 y costarán 72 millones de euros.

Se covertirá así en el tercer país, junto con Estados Unidos y el Reino Unido, en tener este armamento, joya del poderío militar de EEUU en las guerras de las últimas décadas.

Los misiles se integrarán, según el citado diario, en las fragatas F-100 y los submarinos S-80.

Un salto cualitativo en el poder español

Estas armas, de fabricación estadounidense, suponen un salto cualitativo en el poder de la Armada española, pues pueden alcanzar un objetivo a 1.600 kilómetros de distancia con un margen de error de 10 metros.

Conlleva un riesgo nulo para las fragatas, que se pueden situar lejos del objetivo.

Para disparos a medio alcance, España necesitará el visto bueno de EEUU antes del lanzamiento.

Estarán operativos en 2012.

Llamazares pide que pasen por el Parlamento

El coordinador general de Izquierda Unida, Gaspar Llamazares, anunció  que pedirá la comparecencia en el Congreso de los Diputados del ministro de Defensa, José Antonio Alonso, para que explique la compra. "Vamos a pedir la comparecencia del ministro e intentaremos que esto se vote", añadió.

Durante un acto sectorial, afirmó que IU-ICV no puede "aceptar" que España se "incorpore a una escalada bélica comprando sofisticados juguetes bélicos", cuando el país no está ante ninguna "necesidad disuasoria" respecto a ningún otro.

Además, criticó que el ejército español se "subordine" al de Estados Unidos mediante esta compra, puesto que, según recordó, estos misiles "sólo pueden ser guiados" por los estadounidenses.

Por tanto, insistió en que para su organización esta compra es un "disparate" que van a "rechazar", y reiteró que mediante el grupo parlamentario van a intentar que el Congreso "no le dé el plácet al Gobierno" para continuar "este disparate de comprar 24 'Tomahawk' a "mayor loa de los Estados Unidos".