Productores de videojuegos de Galicia reclaman reconocimiento como industria cultural y apoyo para la profesionalización

Plantean constituir la primera asociación gallega del sector a través de la que hablar con una "voz única" de problemas "colectivos"
Productora Gato Salvaje
Productora Gato Salvaje
Gato Salvaje
Productora Gato Salvaje

Productores gallegos de videojuegos están reclamando a las administraciones públicas más ayudas, apoyo para la profesionalización y reconocimiento como industria cultural de los videojuegos, un sector que, aunque en otros territorios se encuentra en pleno apogeo, en Galicia todavía es incipiente y cuenta con "experiencias muy inconstantes por falta de apoyo".

En concreto, los profesionales aseguran que la industria de los videojuegos, que genera divisas desde el ámbito nacional e internacional y da una aportación mayor "que la música, la televisión y la radio juntas", "puede hacer muchísimo por la expansión cultural", pero sólo "yendo fuerte y con criterios de industria".

Así las cosas, critican que en Galicia no haya una industria específica del videojuego, que se encuentra "en un limbo, donde ni es considerado producto tecnológico ni producto cultural", y donde "el apoyo a nivel institucional no existe".

El vocal de contenidos para televisión del Clúster Audiovisual Galego (Clag) y CEO de Ficción Games, Julio Casal, ha pedido una "mayor sensibilidad" para que, al igual que se destinan fondos a otras iniciativas industriales, las administraciones presten "apoyo económico e institucional" a los videojuegos.

Igualmente, el director general de la productora Gato Salvaje, Fernando Prieto, ha coincidido en que en este sector, que "es netamente exportador", lo que falta es financiación y una estructura fiscal más favorable. "Vamos a remolque, falta el dinamismo de países anglosajones, que apuestan por sectores y los sacan adelante. En España cobramos impuestos a todos y damos subvenciones a algunos; es injusto porque no tienes las mismas oportunidades", ha explicado.

Por su parte, aunque la Axencia Galega das Industrias Culturais (Agadic) ha reconocido que no existen en este momento líneas de subvenciones específicas para el sector de videojuegos, ha indicado que los profesionales pueden beneficiarse de ayudas transversales y de otras "medidas de apoyo puntuales y específicas" que tienen relación con las distintas fases de producción, entre las que ha mencionado Micatlántica, Culturgal y Micsur.

Asimismo, ha transmitido que, atendiendo a la clasificación instaurada por la Unión Europea, los videojuegos se encuadran en el epígrafe de las industrias culturales y creativas, lo que, ha dicho, "confirma el acierto de la atención creciente de la Xunta de cara a su representación en Galicia", donde se constata "el incremento de la presencia de creadores, diseñadores y desarrolladores de videojuegos".

Pero la situación actual está despertando en los creadores gallegos la necesidad de unirse para constituir la primera asociación gallega de productoras de videojuegos a través de la que puedan hablar con una "voz única" de problemas "colectivos", para lo que ya han iniciado los primeros encuentros y conversaciones.

Mediante esta organización, que estaría abierta a todos los agentes relacionados con el mundo de los videojuegos, el objetivo es favorecer una interlocución directa con la administración, coordinar acciones, y canalizar líneas de apoyo y la presencia de las productoras gallegas en ferias internacionales que permitan posicionar sus creaciones.

Estudiar videojuegos

En lo relativo al perfil en Galicia de los profesionales de los videojuegos, Fernando Prieto ha comentado que estos presentan un componente "vocacional y muy creativo" y que, "al igual que todas las industrias creativas, tiene que gustar". A pesar de ello, ha insistido en que "aún con capacidad creativa y formación, falta industria y apoyos a nivel de la administración".

En opinión del abogado de Datalawyers y CEO de Iberian Games, Xosé Manuel Rey, otra de las problemáticas a las que se enfrenta el sector en Galicia es precisamente que "no hay un centro de formación específica como puede haberlo en otras zonas", como Madrid o Barcelona, lo que impide dotar de capital humano al sector.

Así, aunque existen titulaciones como el ciclo superior de Animaciones 3D, Juegos y Entornos Interactivos, impartido en la Escuela de Imagen y Sonido del Marcote de Vigo, no hay grados ni másteres específicos en Galicia, por lo que ha abogado por que las universidades gallegas "se lancen a crear una titulación propia".

Ante estas adversidades, empresas como Iberian Games están llevando a cabo iniciativas vinculadas no sólo a la producción y distribución de videojuegos, sino también a través de la puesta en marcha de una incubadora de desarrollo, que busca "unir gente del sector descolgada" que, con el asesoramiento y la coordinación de esta compañía, pueden lanzar proyectos —de los que son co-propietarios—.

DIVERSIFICAR

El vocal de Clag ha comentado que la industria de los videojuegos está capacitada para hacer desarrollos no sólo de carácter lúdico, sino también otros como programas de realidad aumentada o simuladores virtuales relacionados con sectores como la automoción, el naval, el turismo, el patrimonio y la educación, por lo que ha abogado por potenciar en Galicia la diversificación de las temáticas de los videojuegos.

En esta línea, Casal ha manifestado que es necesario que productoras audiovisuales contemplen las herramientas tecnológicas como un medio y apuesten por la diversificación y por "una industria como la del videojuego". Para ello, ha propuesto que industrias audiovisuales y de videojuegos confluyan; algo que, ha indicado, ya empieza a ser "una realidad" a través de las televisiones interactivas y las SmartTV.

De hecho, la empresa en la que es CEO, Ficción Games —división productora de videojuegos de Ficción Producciones—, se encuentra sumergida en el desarrollo de la segunda fase de los juegos educativos 'Tutu' y, recientemente, lanzó su primer videojuego basado en un programa de televisión, concretamente 'A Casa da Conexa' de CRTVG.

Por su parte, Fernando Prieto ha instado a empresas y administración a "quitarse los complejos" y desmarcarse de la idea de que todo lo que se produce en Galicia tiene que estar intrínsecamente relacionado con la identidad cultural de la comunidad. "Tenemos que quitarnos el complejo de que como somos gallegos tenemos que producir cosas gallegas", ha argumentado, una idea a partir de la que Gato Salvaje ha creado la aventura gráfica ambientada en el espacio 'ARK'.

El sector

El 'Libro Blanco del Desarrollo Español de los Videojuegos' elaborado por la Asociación Española de Empresas Desarrolladoras de Videojuegos y Software de Entretenimiento (DEV) en colaboración con ICEX y U-Tad, recoge que en España hay 330 empresas de la industria de los videojuegos, de las que alrededor de una decena se sitúan en Galicia.

Del total nacional, la Comunidad gallega representa un 3,4 por ciento, con lo que se erige como la sexta comunidad autónoma española por número de empresas de videojuegos, por detrás de Madrid —29,8%—, Cataluña —27,1%—, Valencia —10,5%—, Andalucía —8,1%—, y País Vasco —6,8%—.

El 60 por ciento de estas entidades tienen consideración de microempresas —menos de 10 empleados— y sólo un 4,1 por ciento son grandes empresas —más de 50 empleados—. Además, el 68 por ciento de éstas tienen menos de cinco años de vida.

En lo relativo a los trabajadores, en la industria de los videojuegos el 95 por ciento de los empleados tiene menos de 45 años —el 45% de ellos tiene menos de 30 años— y se estima que el número de empleos se duplique en 2017 respecto a los datos de 2013, hasta los 5.271 puestos de trabajo.

Asimismo, el libro blanco, que indica que el 44 por ciento de las empresas dice haber recibido alguna ayuda pública, también calcula que la facturación crecerá en un 130 por ciento en tres años, hasta alcanzar los 723 millones de euros, lo que supone un reflejo de cómo "el sector está creciendo".

Mostrar comentarios

Códigos Descuento