Zoido defiende que los bares precintados "estaban advertidos" y pese a ello "reiteraron" sus infracciones

Alega que "esto no es fruto de improvisaciones ni decisiones repentinas"

A cuenta del debate público suscitado por el precinto de 12 bares de copas del barrio del Arenal y de la Alameda de Hércules durante el último fin de semana, la mayoría de ellos por las personas que consumían alcohol en zonas de vía pública aledañas a tales negocios, el alcalde hispalense, Juan Ignacio Zoido, ha defendido que todos estos negocios estaban "advertidos" de las consecuencias de no adecuar su actividad pero reiteraron las infracciones que han motivado su cierre.

En rueda de prensa, el alcalde ha desgranado las "cifras" de las actuaciones protagonizadas el pasado fin de semana por la Policía Local y los servicios municipales. Y es que como ha explicado, desde la noche del jueves hasta la tarde del domingo fueron realizadas 117 inspecciones en las zonas del Arenal, la calle Julio César, la avenida de los Reyes Católicos, el Paseo de Colón y la Alameda de Hércules. Fruto de estas actuaciones resultaron "37 partes de denuncia y 12 precintos". La noche del jueves al viernes, según precisa el alcalde, fueron inspeccionaron 55 establecimientos con el resultado de 27 denuncias pero ningún precinto, si bien ya el viernes fueron precintados seis negocios, todos ellos inspeccionados durante la citada jornada previa.

En ese sentido, el alcalde ha señalado el caso de estos seis negocios, porque "estaban previamente advertidos por la Policía Local, luego no ha habido nada sorpresivo ni repentino". "Si se demuestra que los negocios están incumpliendo las normas y ordenanzas se les denuncia y si continúan incumpliendo reiteradamente, se les precinta el bar, pero nunca se precinta como consecuencia de una primera denuncia", dice el alcalde, quien alega que los negocios precintados han sido ya objeto de "actuaciones" por parte del Ayuntamiento a cuenta de supuestos incumplimientos y denuncias, "alguno de ellos casi medio centenar y alguno un poco más".

"Esto no es fruto de improvisaciones ni decisiones repentinas, porque (a los locales precintados) se les ha advertido previamente y no se puede incurrir en lo mismo al día siguiente", dice el alcalde, en ese sentido, ha defendido "el compromiso del Ayuntamiento con los vecinos de las zonas afectadas, para actuar y que las normas se cumplan, porque no podemos hacer caso omiso ante reiterados incumplimientos de las normas por parte de algunos establecimientos ni tolerantes con la botellona". El Ayuntamiento, según insiste, no permitirá "ni lo uno ni lo otro", sobre todo dadas las denuncias y quejas de "muchísimos vecinos".

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