La Guardia Civil ha imputado a una persona como presunto autor de un delito relativo a la protección de la fauna, por colocar lazos para eliminar alimañas en la finca en la que trabaja, del término municipal de Torre de Juan Abad, y que causó la muerte por asfixia del Lince Kairós.

La imputación, según ha informado la Delegación del Gobierno en Castilla-La Mancha en un comunicado, se ha producido después de que las investigaciones iniciadas por el Servicio de Protección de la Naturaleza de la Comandancia de la Guardia Civil de Ciudad Real (Seprona), a raíz de ser alertados por los Agentes medioambientales de la Consejería de Agricultura del hallazgo del cadáver de un lince ibérico (Lynx pardinus) en una finca.

De inmediato, miembros del Seprona de la Guardia Civil se desplazaron a la zona y tras comprobar los hechos, procedieron junto con agentes medioambientales de la Consejería de Agricultura y del programa Life Iberlince, a la recogida del cadáver del animal, el cual fue trasladado al Centro de Recuperación de Fauna Silvestre "El Chaparrillo" en Ciudad Real para la realización de la necropsia del cadáver.

En el momento de la recogida y examen inicial del cadáver no se apreciaron signos que evidenciaran que la causa de la muerte podría deberse a una acción ilícita. Sin embargo, se inició una investigación, al encontrar los investigadores, indicios de que el lince podría en realidad haber muerto en un lugar distinto al que fue hallado y existir por tanto algún tipo de participación humana en los hechos.

La persona imputada ha sido identificada como J.N.C., de 32 años y vecino de Castellar de Santiago (Ciudad Real), como presunto autor de un delito de los relativos a la protección de la fauna.

Kairós era el tercer lince ibérico que ha aparecido muerto en la provincia de Ciudad Real después de que en julio de este año fueran reintroducidos en Sierra Morena Oriental ocho ejemplares procedentes del programa de cría en cautividad de esta especie.

Antes habían sido encontrados muertos los linces Kenitra y Kala, todos ellos liberados en el marco del proyecto Life Iberlince, que trabaja con el objetivo de lograr la recuperación de esta especie emblemática en Sierra Morena Oriental y Los Montes de Toledo, dos lugares de la península ibérica que históricamente había sido ocupados por la especie.