Samir Suleiman vivió hasta octubre de 2003 —y desde agosto— en el local de la calle Virgen del Coro. Allí coincidió con El Morabit, con Basel Ghalyoum, Rifad Anouar, entre otros.

Suleiman asegura que cada uno de los habitantes de Virgen del Coro hacía su vida, y que jamás percibió nada extraño.

En cuanto al procesado El Morabit, Suleiman lo ha descrito como una persona muy tranquila: "Sé que tenía unos exámenes fuera de España y que estaba de paso", afirma.

Según el testigo, Serhane el Tunecino iba de vez en cuando a casa, "pero se quedaba en la puerta o en la calle".

Sigue el juicio del 11-M en el especial de 20minutos.es