El juez dejó ayer en libertad con cargos a la mujer de 21 años que denunció el abandono de un bebé en un contenedor y luego resultó ser suyo. Los agentes acudieron el domingo a la llamada de la mujer, de origen boliviano, que estaba en la calle Duque de Calabria, y se llevaron a la pequeña a La Fe. Cuando se pusieron a investigar el caso, vieron en la tarjeta de identificación de la niña un domicilio. Al personarse allí, les abrió la puerta la madre, que resultó ser la misma que los había alertado sobre el supuesto abandono, y la detuvieron, aunque ayer salió libre con cargos. La Generalitat ha asumido la tutela del bebé.
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