El PP de Sevilla se ha desligado este sábado de "cualquier actividad" del exconcejal popular Joaquín Peña ajena al "ámbito político", toda vez que Peña es uno de los imputados en la operación Enredadera, que investiga una red de sobornos a funcionarios y responsables públicos a cambio de contratos públicos para la empresa Fitonovo,

La operación 'Enredadera', derivada de la operación Madeja, que investigaba ya los contratos públicos adjudicados a la empresa Fitonovo, se saldó como es sabido con la detención de 32 personas en 13 provincias de España, motivando después sonadas imputaciones como las del ex primer teniente de alcalde de Sevilla Antonio Rodrigo Torrijos (IU-CA), el exconcejal del PSOE Manuel Gómez Lobo o el actual portavoz municipal de IU-CA, José Manuel García, quien acaba de renunciar a su acta de edil.

En la causa figuran también como imputados el antiguo asesor de IU-CA Antonio Miguel Ruiz Carmona; el exconcejal del PP Joaquín Peña; el exasesor socialista Domingo Enrique Castaño; el exjefe del servicio de Parques y Jardines del Ayuntamiento Francisco Amores; el jefe de mantenimiento del Parque María Luisa, Francisco Luis Huertas; el funcionario de la Diputación de Sevilla Carlos Podio; el funcionario jubilado de esta institución Elías Oliver; y trabajadores y directivos de Fitonovo.

Después de que la juez Mercedes Alaya haya levantado el secreto de sumario que pesaba sobre las actuaciones, ha trascendido que la juez sospecha que el exconcejal popular Joaquín Peña compró un Volkswagen Passat por importe de 21.046 euros "del que abonó 6.600 euros al concesionario", mientras que "el resto supuestamente sería pagado por Fitonovo", cerrando la operación de compra después de que "interviniera" en las negociaciones entre Fitonovo y Albaba para la adjudicación de un 'macrocontrato'. La investigación, en este punto, señala la supuesta conexión del administrador de Albaba, Carlos Alfonso Lozano, con el alcalde de Tomares y senador José Luis Sanz, otrora presidente del PP de Sevilla.

En ese sentido, el PP de Sevilla ha defendido que en esta causa, "la Justicia ha acusado de supuesta financiación ilegal tanto al PSOE como a IU en el Ayuntamiento de Sevilla durante la anterior legislatura, en la que gobernaban en coalición ambas formaciones políticas, a cambio de contratos municipales", pues en efecto la juez cree que Fitonovo abonó durante cuatro años al PSOE cantidades que oscilan entre 30.000 y 60.000 euros, mientras que IU habría recibido 155.000 euros en "dádivas" entre los años 2010 y 2011.

El PP de Sevilla aclara que desconocía "las actividades que pudieran haber realizado fuera de su actividad política tanto el ex director general de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Sevilla Joaquín Peña, que tras ser implicado en el caso Madeja fue cesado fulminantemente por el alcalde Juan Ignacio Zoido, así como el también implicado empresario sevillano".

Además, el PP de Sevilla asegura que no tenía "ningún tipo de relación más allá del ámbito político" y se desvincula asimismo de "cualquier actividad que tanto el ex director general de Medio Ambiente como el empresario sevillano implicado pudieran haber cometido fuera del ámbito político". Ante esta situación, el PP de Sevilla tomará "las medidas legales pertinentes ante cualquier tipo de acusación que pudiera realizarse en este sentido". Asimismo, desde el PP de Sevilla "no se va a consentir que se ponga en duda la honorabilidad de la anterior y la actual dirección del PP de Sevilla".