El Pleno de las Cortes de Castilla y León ha arrancado este martes con la lectura de una Declaración Institucional con motivo del Día Contra la Violencia de Género con el fin de reclamar un modelo "integral y coordinado" de atención a las víctimas desde la colaboración de todas las administraciones, instituciones y entidades implicadas.

La presidenta de las Cortes, María Josefa García Cirac, ha dado lectura a esta Declaración que comenzaba con la "condena" de todos los miembros de las Cortes a "cualquier manifestación de violencia hacia la mujer". "Queremos hacer público nuestro compromiso de seguir trabajando contra esta lacra social", ha aseverado.

Asimismo, en el documento los miembros de las Cortes han dado a conocer su compromiso de "continuar trabajando sin descanso para la eliminación de este gravísimo problema que afecta a todos y que socava los cimientos de una sociedad que se precia de ser democrática". "La violencia de género es un atentado a la dignidad de la mujer y a sus derechos fundamentales y un estigma social contra el que todos debemos luchar de manera enérgica hasta lograr su total erradicación", ha señalado la presidenta del Parlamento regional.

Tras recordar la existencia de una leyes estatales y regionales con el objeto de erradicar este tipo de violencia, las Cortes han manifestado su apoyo a "el trabajo participativo dirigido a construir una sociedad más justa e igualitaria en la que desaparezcan desigualdades", una acción que "pueda ser exportable" a otros territorios.

"El silencio nunca es la respuesta, ni para la víctima de la violencia, ni para quienes actúan o se posicionan contra ella", se ha detallado en la Declaración, a través de la que se ha animado a las mujeres afectadas a "dar un paso adelante" y a ponerse en manos de profesionales.

Por último, en este Documento se ha abogado por educar en una cultura basada en la igualdad, al tiempo que se ha plasmado el compromiso de las Cortes de mantener una posición activa a favor de la misma.