El programa LIFE+Iberlince ha amparado la celebración de unas jornadas en las localidades sevillanas de Cazalla de la Sierra, Guadalcanal y Constantina, ubicadas en la comarca de la Sierra Norte, cuyas calles acogieron exposiciones con contenidos relativos a la conservación y reintroducción del lince ibérico.

Según los datos del proyecto, recabados por Europa Press, técnicos de LIFE+Iberlince intercambiaron impresiones con los ciudadanos de estas localidades y repartieron material divulgativo sobre la reintroducción del lince ibérico en los territorios de la Sierra Norte de Sevilla, de donde desapareció décadas atrás.

Los resultados de las jornadas fueron "satisfactorios", detectándose mediante esta interacción con los ciudadanos una "alta" aceptación ante la posibilidad de la vuelta del lince a sus territorios y una gran preocupación por el declive de las poblaciones de conejo.

Precisamente, fue en esta comarca donde el pasado fin de semana la consejera de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio de la Junta de Andalucía, María Jesús Serrano, firmó cuatro convenios de colaboración para desarrollar el programa con propietarios de fincas privadas, concretamente con las haciendas 'La Lanchuela' (El Pedroso), 'Majada Alto' y 'La Jabata' (Villanueva del Río y Minas), 'Majada Vieja' y 'Gibla', estas dos últimas ubicadas en el término municipal de Constantina.

Los territorios para el lince,

De propiedad privada

Estos convenios permiten realizar una gestión adecuada para el lince en todas aquellas áreas bien conservadas de monte mediterráneo favorables para la especie, además de convertirse en un instrumento eficaz para sensibilizar y hacer partícipes a propietarios y sociedades de cazadores en la conservación de este felino. Para la consejera, este tipo de iniciativas cobra un papel "esencial", ya que la mayoría de los territorios con presencia de este animal o potenciales para su reintroducción (94%) son de titularidad privada.

La mayor parte de las acciones contempladas en estos acuerdos están relacionadas con la mejora de las poblaciones de conejo silvestre, presa básica y principal en la dieta del lince ibérico. Estas medidas consisten básicamente en la construcción de refugios de cría, la instalación de comederos y bebederos, señalización de zonas de reserva, desbroces de matorrales densos para favorecer el crecimiento de los pastos en zonas con escasez de alimento, así como en la construcción de vivares y entaramados para aquellas zonas con escasez de refugio.

Estas actuaciones permitirán por tanto mejorar el hábitat de alimentación de esta especie, contribuyendo así a eliminar uno de los dos problemas o amenazas más importantes a los que se enfrenta y que no es otra que la escasez de alimentos, aunque no se puede perder de vista los atropellos de ejemplares en carreteras convencionales. En este sentido, en lo que va de año han muerto en Andalucía una veintena de linces atropellados.

Con el pasado proyecto LIFE se suscribieron un total de 140 convenios de colaboración entre propietarios de fincas, gestores y sociedades de cazadores. En el desarrollo del actual se han formalizado ya un total de 132, mientras que 171 se encuentran en tramitación, por lo que se prevé la formalización de al menos 303 acuerdos.