El PP y el PSOE han iniciado los contactos para explorar fórmulas que permitan incrementar el control de los viajes de los diputados que paga el Congreso, después de la polémica surgida con los desplazamientos a Canarias del presidente extremeño, José Antonio Monago, durante su etapa de senador.

Fuentes de ambos partidos han confirmado a Efe el inicio de las conversaciones que mantienen los secretarios generales de ambos grupos parlamentarios: José Antonio Bermúdez de Castro por parte del PP, y Miguel Ángel Heredia, del PSOE.

La idea es intentar articular alguna fórmula que permita incrementar el control sobre los viajes de los diputados sin afectar a su derecho a ejercer la actividad parlamentaria en todo el territorio nacional.

De momento el PSOE ya ha anunciado que llevará a la próxima reunión de la reforma del Reglamento del Congreso sus medidas para aumentar la fiscalización y control de los viajes de los parlamentarios.

La idea del PSOE es que los diputados tengan que justificar los motivos de sus viajes políticos o de representación.

Populares y socialistas coinciden eso sí, en que los desplazamientos de partido también deben ser sufragados por las Cámaras porque forman parte de la acción política de sus representantes, que no se puede separar de su actividad parlamentaria.

Ya esta mañana, el presidente del Congreso, Jesús Posada, se reunió con los portavoces de la Izquierda Plural, José Luis Centella y Joan Coscubiela, para hablar sobre este mismo asunto.

La reunión había sido solicitada por Centella y Coscubiela, que consideran necesario que la Cámara articule medidas para mejorar la transparencia del trabajo de los diputados.

Posada ya ha adelantado que está abierto a escuchar las sugerencias de los diferentes grupos parlamentarios, aunque personalmente es partidario de que ese posible control sobre los desplazamientos de los diputados lo ejerzan directamente los grupos políticos y no la Cámara como institución.