El alcalde de Toledo, Emiliano García-Page, ha adelantado este viernes que el Ayuntamiento está redactando un proyecto que "recomponga" a nivel urbano el entorno de la estación de autobuses de la ciudad y su conexión con las escaleras de Safont, que espera que esté terminado "en los próximos meses" de tal forma que se ponga en marcha a principios de la próxima legislatura.

García-Page ha realizado este avance durante su visita a las dársenas del remonte de Safont, que han quedado abiertas tras la instalación de varios semáforos que permiten la salida de los autobuses, donde ha recordado que ese proyecto formaba parte del de construcción del remonte, aunque cuando llegó la presidenta regional, María Dolores de Cospedal, "quedó reducido a una tercera parte".

Ahora, al retomar esta iniciativa se remodelarán "con carácter inmediato" y con cargo al presupuesto de eficiencia energética, las luces de esa zona, aunque más tarde se remozará la señalización de los autobuses de la estación y el lugar donde reposan los vehículos porque "está degradado" y "no queda acompasado con la vuelta" que el Ayuntamiento le dio a esa zona, cuando abordó el arreglo de la estación de autobuses, ha indicado el alcalde.

En cuanto a la instalación de los semáforos de Safont, el primer edil ha lamentado "y mucho" no sólo que se retrasase la obra sino que toledanos "como Esteban, Tirado y Labrador, se dediquen a que no le salgan las obras a Page". A su juicio, si en vez de realizarse esta obra en Toledo fuera otro ayuntamiento "no hubiera habido la misma racanería ni se hubiera escatimado con la seguridad vial de la ciudadanía", ha destacado.

"Hemos desbloqueado la situación y espero que pueda ir poco a poco rodando el tráfico turístico", ha indicado el primer edil, que ha recordado que la obra está encargada a la Junta y que el Ayuntamiento ha podido acometer esta actuación una vez que la empresa les ha dado autorización. Además, ha comentado que, si les hubieran dado tiempo, podrían haber comunicado incluso otras mejores que se podrían haber hecho en la zona.

Recepción de obras

Por su parte, el concejal de Movilidad y Seguridad Ciudadana, Rafael Perezagua ha señalado que "ahora sí" que se puede decir que las dársenas "están en condiciones para recibir a los autobuses que traen turistas a la ciudad", ya que la actitud del equipo de Gobierno era "que esto no se abriese hasta que no se tomasen las medidas necesarias".

En este contexto, ha pedido a la Junta de Comunidades que explique "cuánto ha costado al final la obra", ya que, según ha dicho, le consta que ha habido una modificación "de más de 300.000 euros", preguntándose, con esas cantidades, "qué tanto les costaba" haber asumido los 18.000 euros que ha costado cambiar las señales "que se han puesto mal, la señalización horizontal en la Avenida de Castilla-La Mancha y poner los semáforos".

Una cantidad que el Ayuntamiento va a asumir teniendo en cuenta "la actitud poco constructiva que tiene Cospedal con Toledo". "Lo que nos importa es que dimos un ultimátum de quince días y lo hemos cumplido y lo asumiremos", ha precisado el concejal, que ha destacado que al Consistorio le hubiera gustado "que el día que inauguraron esto hubiese sido resuelto y no hubiésemos tenido tantos problemas".

Preguntado por la recepción del remonte por parte del Ayuntamiento, Rafael Perezagua ha subrayado que "lo lógico que tiene que hacer (la Junta) es entregar la obra", aunque ya ha advertido de que si eso "se produce alguna vez" van a hacer una inspección "muy minuciosa".

La nueva señalización se complementa en la Puerta de Bisagra con señales que prohíben el paso a los autocares, salvo los que dispongan de autorización, y en estos días la Policía Local informará a los conductores de las nuevas directrices para recoger y descargar a los viajeros.