La Sección de Medio Ambiente de la Fiscalía de Granada ha archivado las diligencias de investigación penal que abrió para analizar el caso del desmantelamiento de los restos de la villa romana de entre el siglo I y el VI hallados durante la construcción de un aparcamiento en Los Mondragones, en Granada capital, y ha considerado que los hechos no revisten carácter de delito.

Según han informado a Europa Press fuentes del Ministerio Público, el hallazgo de los restos fue "casual" y "completamente inesperado", por lo que no se puede reprochar actuación delictiva a la empresa constructora que cumplió con la orden de paralización de los trabajos, y con las instrucciones de la Junta de Andalucía. La administración no consideró conveniente su declaración de BIC y consideró que los restos debían ser trasladados para ser expuestos en un museo, si bien ahora permanecen en una nave, a la espera de que decidan su destino las autoridades competentes.

En el decreto de archivo, de fecha 15 de octubre y que este martes adelanta 'Granadaimedia', la fiscal de Medio Ambiente y Patrimonio de Granada, Sara Muñoz-Cobo, considera que se respetó la ley por parte de las administraciones y que la empresa constructora cumplió igualmente, e incide en que, aunque hubiese "daños irreparables", al producirse en el momento del hallazgo y no haber prevenciones arqueológicas, estos no fueron "ni intencionados ni por falta de diligencia".

La investigación se abrió el 19 de mayo, después de que el fiscal de Medio Ambiente y Patrimonio adscrito a la Fiscalía General del Estado, Antonio Colmenarejo, abriera un expediente para recabar toda la información al respecto.

Una vez concluido ese informe, la Fiscalía en Granada, que recibió por este asunto una primera denuncia que no llegó a tramitar por encontrarse en estudio de forma paralela en la General, abrió la investigación, y llamó a declarar a testigos para aclarar lo sucedido, entre ellos el arqueólogo del Ayuntamiento, el jefe de servicio de la Delegación de Cultura, y el responsable de la constructora del aparcamiento.

Fue el pasado año, durante las obras de construcción del aparcamiento —junto al que además se ha abierto un supermercado—, cuando se hizo patente este importante hallazgo arqueológico compuesto por restos que abarcan desde el siglo I al VI. En la parcela se pudieron detectar dos grandes zonas en las que se identificaban una zona de vivienda y una almazara romana y otra de enterramientos de origen visigodo.