ha vuelto a expresar este viernes su malestar por el hecho de que aún no haya finalizado la variante de Pajares, la conexión ferroviaria que unirá Asturias con León por alta velocidad y que sigue en construcción.

"En 2004 estaba convencido de que, si Dios me daba salud, podría viajar algún día hasta Oviedo, Gijón y Avilés en un tren de alta velocidad

sobre las vías europeas. Hoy tengo serias dudas de que ese sueño asturiano, de inspiración profundamente española y europea, lo puedan hacer realidad mis hijos", ha lamentado.

Cascos, en una conferencia que ha impartido en un despacho de abogados en Oviedo, ha dicho que el próximo 21 de noviembre se cumplirá el XX aniversario de la Ley

que declaró prioritarias las obras de la Variante de Pajares. Por eso, ha considerado que la variante de Pajares no sólo es un asunto de interés regional, sino que "están

en juego el Estado de Derecho, la cohesión territorial y la convergencia económica".

"La operación definitiva de sustracción a Asturias de su línea de alta velocidad la ejecuta el gobierno de Zapatero a partir de 2009, con la complicidad de sus colegas asturianos, para detenerla en fondo de saco en León, y cancelar su continuidad hacia Asturias", ha lamentado.

Según ha dicho Cascos, la variante de Pajares siempre se diseñó para el tráfico mixto, es decir, de pasajeros y mercancías, en ancho internacional (UIC). Quienes están repitiendo el "mantra" de que por ancho internacional no pueden circular mercancías "mienten" y están condicionados con el 'lobbie' de Renfe, ha dicho.

"Aprovecho para advertir que este mantra sobre el tráfico mixto lo repiten los de la campaña anti Variante para no hablar del ancho UIC, como si no supieran que el tráfico mixto está previsto desde que se gestaron sus proyectos", ha subrayado.

El exministro de Fomento ha apuntado que buena parte de la responsabilidad de que no se haya avanzado más con la variante la tiene la ausencia de un frente en la opinión pública asturiana que exija lo que marca la ley, como lo hacen, por ejemplo, en otros territorios del país para reivindicar sus infraestructuras.

"Lo cierto es que en Asturias, salvo Foro, nadie se mueve púlicamente ni se pronuncia abiertamente para reclamar que el ministerio de Fomento del gobierno de España respete en el Principado el Estado de Derecho y cumpla la ley, con objeto de que la Variante de Pajares sea una obra que tenga la mayor prioridad, cosa que no es mucho pedir veinte años después de haberse promulgado la ley de la Variante, para que Asturias no se convierta en un gueto ferroviario de ancho ibérico en España", ha insistido.