El 88% de las listas de ANV tiene miembros de la ilegalizada Batasuna

La Fiscalía concentrará sus esfuerzos en las candidaturas «contaminadas». Según ANV, «hay una caza de brujas».
A medida que se aproxima el 2 de mayo, día en el que se prevé que la Fiscalía General del Estado impugne las candidaturas sospechosas de burlar la ley de partidos, los ánimos de los dirigentes del partido Acción Nacionalista Vasca (ANV) y de sus detractores se caldean cada vez más.El cotejo entre las 245 listas electorales presentadas por ANV en el País Vasco y Navarra y las presentadas por las agrupaciones sucesoras de Batasuna ilegalizadas por el Supremo en las elecciones de 2003 arroja 600 candidatos coincidentes, según desveló ayer el diario El País. Esto quiere decir que en el 88 % de esas listas electorales hay al menos un candidato susceptible de ser vinculado con la antigua Batasuna. Son estas candidaturas sospechosas  (más numerosas en Vizcaya y Guipúzcoa) sobre las que la Fiscalía centra ahora sus esfuerzos de impugnación, una vez  concluido que no hay motivos para ilegalizar la formación por entero. El partido se remonta a los años treinta y entre sus estatutos se haya el rechazo expreso a la violencia.

Las coincidencias llevaron, en cualquier caso, a decir ayer al presidente del PP en Vizcaya, Antonio Basagoiti, que «las listas están más contaminadas que una lechuga en Chernobyl».

«Derecha cavernícola»

Los dirigentes de ANV se defendieron argumentando  que se ha desatado «una caza de brujas» y culpando a «la derecha cavernícola» de lanzar «mentiras, insultos y manipulaciones».

Afirmaron también que su objetivo no es «la continuación ni la sucesión de ninguna formación política».

Tampoco salió ayer bien parado el director general de la Policía y la Guardia Civil, Joan Mesquida, quien tuvo que justificar que los dos cuerpos hayan presentado informes diferentes sobre la ANV al juez Garzón. Mesquida dijo que pasa porque tienen fuentes, antecedentes y bases de datos distintos.

Más años para Bienzobas

El fiscal jefe de la Audiencia Nacional, Javier Zaragoza, elevó ayer de 52 a 72 años de prisión la petición de pena para el etarra Jon Bienzobas en el juicio por el asesinato en febrero de 1996 del ex presidente del Tribunal Constitucional Francisco Tomás y Valiente. Zaragoza mantiene la solicitud de 30 años por la acusación de atentado, pero sube la petición de pena para el resto de delitos. El fiscal afirmó que la respuesta de la justicia «debe ser rigurosa», mientras que el etarra negó la legitimidad del tribunal que le juzga.

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