El portavoz del PP en el Parlamento vasco, Borja Sémper, ha admitido que en su partido están intentando ver cómo afrontan "tanta basura con equilibrio", después de que en las últimas semanas se haya imputado a varios miembros del PP en casos de corrupción como la 'Operación Púnica' o el caso de las supuestas 'tarjetas B' de Caja Madrid.

"Es un ambiente lúgubre, es una ambiente triste, un ambiente de asco, de profundo rechazo, de tristeza. Estamos viendo cómo afrontamos tanta basura con equilibrio, porque a uno sólo le salen palabras gruesas de la boca cuando conoce que compañeros de militancia se han aprovechado de la política para enriquecerse", ha reconocido en una entrevista en Cope recogida por Europa Press.

En esta línea, el parlamentario ha confesado que se "necesita mucha más contundencia y mucha más velocidad". "Es como si no entendiéramos el grado de cabreo ciudadano que existe en estos momentos en la calle, es como si no fuéramos conscientes muchas veces los políticos", ha expresado.

En todo caso, ha querido resaltar que hay algo "positivo" y es que "los mecanismos de control" y el "sistema" están funcionando. Por eso, ha invitado a los ciudadanos a "compaginar la indignación" por que haya políticos corruptos con la "tranquilidad" por que el sistema "reacciona correctamente".

Finalmente, ha subrayado que aunque el acuerdo que ha propuesto el PP al PSOE para actuar contra la corrupción "puede parecer retórica", a su juicio "hay que pactar al más alto nivel con las más altas consecuencias", y ha lamentado que "el PSOE se haya negado desde ya" a llegar al consenso con su partido.