En el escrito, hecho público por el propio Díaz de Mera, el ex director de la Policía relata su versión de sus conversaciones con García Castaño desde su propia declaración ante el tribunal el pasado 28 de marzo y solicita al tribunal un careo con el comisario.

"Lo ha hecho cuando ha negado que me hubiera informado sobre la existencia de un informe que hablaba de las conexiones entre ETA y los islamistas", afirma el actual eurodiputado del PP.

Añade que el comisario tampoco se habría atenido a la verdad cuando "ha relatado la primera conversación que mantuvo conmigo la tarde del 28 de marzo".

"(También) Lo ha hecho cuando ha puesto en mi boca palabras que nunca pronuncié relativas a la existencia de 'presiones políticas'. Y lo ha hecho cuando ha indicado que yo le pedí decir algo distinto de la verdad", añade.

Sostiene Díaz de Mera que es en esa conversación del 28 de marzo, cuando "por primera vez" el comisario le informa de que "el informe 'manipulado' está incorporado al sumario".

"Lo cierto es que en la misma tarde del 28 de marzo, sus primeras palabras fueron 'estoy dispuesto a ir a la cárcel por ti por revelación de secretos'", relata Díaz de Mera.

"Posteriormente, en la segunda y tercera conversación telefónica que mantuvimos, se produce un cambio y me dice que diga todo lo que quiera y haga lo que quiera menos facilitar su identidad", prosigue.

Relata entonces que en la tarde del 29 de marzo se produce "un cambio radical de actitud" en el comisario y que este le indica que "a la mañana siguiente recibirá el asesoramiento de un juez y que me comunicará lo que decide".

"Incorrecto y excitado"

"En esta conversación se manifestó incorrecto, excitado y me llegó a preguntar, cuando le recordé si quería que repitiera el relato sobre el informe que me había reiterado la tarde anterior, si le estaba grabando", asegura Díaz de Mera.

Afirma asimismo que en la tarde del 30 de marzo, el comisario llamó a uno de los hijos del propio Díaz de Mera para "decirle que le habían recomendado no tener comunicación alguna" con él y que "lo sentía mucho".

El ex director de la Policía concluye su escrito solicitando al tribunal un careo con el comisario.

"Ante tan flagrante cúmulo de falsedades, considero que contrastar las dos versiones de los hechos podría contribuir a demostrar la veracidad de la información que he proporcionado. Por todo ello, solicito al Tribunal la práctica de un careo entre el señor García Castaño y yo mismo en presencial judicial", concluye.