La organización del viaje de manera individual es cada vez más habitual. Así, en estos momentos, ocho de cada 10 turistas que llegan a la Costa del Sol conformaron su propio paquete turístico, mientras que el 20 por ciento restante sí prefiere adquirirlo en una agencia de viajes.

Precisamente, casi la mitad de los turistas organizaron su viaje hasta la Costa del Sol de uno a seis meses antes de realizarlo. Concretamente, el 26,2 por ciento lo cerró de uno a dos meses antes de viajar y un 6,7 por ciento lo decidieron con menos de una semana de antelación.

Para tres de cada 10 este destino era desconocido, según el balance turístico del verano realizado por el Patronato de Turismo y consultado por Europa Press. No obstante, destaca que el 20,8 por ciento de los viajeros había estado en la provincia entre tres y cinco veces.

El destino ha tenido entre junio y agosto una valoración de 8,97 puntos sobre 10. Esta alta satisfacción incide en que dos de cada tres viajeros que llegaron en este periodo manifieste su intención de regresar a medio plazo.

De junio a septiembre visitaron el destino Málaga-Costa del Sol más de 4,9 millones de personas, lo que supuso un incremento de casi el dos por ciento con respecto al año anterior, generando más de 49 millones de estancias y un impacto económico directo de 3.700 millones de euros.

Más llegadas en avión

También destaca el número de personas que se desplazaron en su propio vehículo aunque el transporte aéreo sigue siendo el más empleado. De hecho, aumentaron los pasajeros en avión más de un cinco por ciento, tanto internacionales como nacionales; y en el tren de alta velocidad hubo un ligero incremento respecto al verano pasado del 1,76 por ciento.

Hasta agosto, la cuota de la demanda nacional ascendió y se situó en algo más de la mitad del total de turistas. En este sentido, según los datos del Patronato, aumentó el número de viajeros que se encontraban trabajando, en detrimento de los jubilados.

La edad media se situó en los 42,4 años; inferior a la observada durante el verano de 2013. El presupuesto medio fue de 917,51 euros; superior a la media anual. Por término medio, los turistas se quedaron 9,4 días durante los meses de verano.