El juez Silva, condenado a 17 años de inhabilitación por prevaricación en el 'caso Blesa'

  • Cometió el delito durante su investigación sobre el expresidente de Caja Madrid y el expresidente de la patronal.
  • La sentencia cuenta con el voto discrepante del presidente del tribunal.
  • La defensa de Silva ha anunciado que recurrirá.
El juez Elpidio José Silva a su salida del Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM), tras la tercera sesión del juicio.
El juez Elpidio José Silva a su salida del Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM), tras la tercera sesión del juicio.
Juan Carlos Hidalgo / EFE
El juez Elpidio José Silva a su salida del Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM), tras la tercera sesión del juicio.

El Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) ha condenado a 17 años y medio de inhabilitación al juez Elpidio José Silva por un delito de prevaricación continuada cometido durante su investigación sobre el expresidente de la patronal Gerardo Díaz Ferrán y el expresidente de Caja Madrid, Miguel Blesa, a quien envió en dos ocasiones as prisión. Dos de los tres magistrados del Tribunal sostienen que a Elpidio José Silva "le importaba poco la ley" y tenía el "plan preconcebido" de "castigar" a toda costa a Miguel Blesa por su gestión de Caja Madrid, que materializó "fabricando" una operación "inquisitorial" y "delirante" contra el exbanquero que culminó en su encarcelamiento.

"El acusado sabía muy bien lo que hacía y quería hacerlo. Le importaba poco la ley", afirman dos de los tres magistrados del Tribunal Superior de Justicia de Madrid que han condenado a Silva a 17 años y medio de inhabilitación y a pagar una multa de 6.300 euros y una indemnización de 10.000 euros al expresidente de la CEOE Gerardo Díaz Ferrán por daños morales.

La sentencia, que cuenta con el voto discrepante del presidente del tribunal Arturo Beltrán a favor de la absolución, le atribuye un delito de prevaricación continuada en concurso con dos delitos contra las garantías constitucionales y conlleva su expulsión de la Carrera Judicial. La defensa de Silva, ejercida por el abogado Gonzalo Boyé, ha anunciado que recurrirá la resolución ante el Tribunal Supremo.

Los magistrados Eduardo Beltrán y Jesús María Santos Vijande creen que "tuvo el comportamiento más grave que puede cometer un juez" al prevaricar de forma continuada desde que decidiera reabrir la causa en la que investigaba a Blesa y Díaz Ferrán por la concesión de un crédito de 26,6 millones al Grupo Marsans en noviembre de 2012. Una causa que él mismo había archivado casi dos años antes por no apreciar indicios de delito y que reabrió "contra dos ciudadanos por su propia voluntad y sin nada que lo justifique", para finalizar en el doble encarcelamiento del exbanquero justificado en "motivaciones insólitas" y "delirantes".

"Y poco importa aquí el nombre y relevancia mediática del investigado, pues las reglas y garantías del proceso son aplicables a cualquiera", resalta la sentencia, que será recurrida ante el Tribunal Supremo por el abogado del acusado. Silva persiguió desde el principio un "objetivo", el de encarcelar a Miguel Blesa, la primera vez bajo fianza de 2,5 millones en mayo de 2013.

Visto que Blesa consiguió prestar esa cantidad en menos de un día, "decidió asegurarse de que eso no volviera a ocurrir" y dictó nuevamente una prisión quince días después, pero de forma incondicional y sin fianza, bajo "motivaciones insólitas, por su grado de especulación" y sin haber resuelto sobre la devolución de la fianza.

Para dar cumplimiento a su "plan preconcebido", el juez, actualmente en situación de excedencia voluntaria, "se fabricó una nueva" causa con la compra del City National Bank de Florida, ya que no había posibilidades de encarcelarle en la del crédito. "No es que haya habido decisiones discutibles o meros errores, es que se ha dirigido toda una operación judicial de corte inquisitorial, a fin de descubrir cualquier cosa que pudiera imputarles a Blesa y Díaz Ferrán, arrogándose unas competencias ilimitadas", asegura.

Así fue como transformó "lo que era la denuncia inicial en una verdadera causa general contra el señor Blesa". En este sentido, destacan que el "mero voluntarismo" que movió a Silva queda acreditado no solo en la "gravedad" de sus resoluciones, sino por la "persistencia de su propósito y el tratamiento preferencial" que dio a Manos Limpias, a cuyos abogados "dispensaba facilidades de acceso" a su despacho y por quienes encarceló a Blesa sin que el sindicato estuviera debidamente personado.

También consideran prevaricadora la providencia en la que ordenó, entre una abultada batería de diligencias, la incautación de los correos corporativos del exbanquero, cuando "medidas tan invasivas" requieren una motivación que no se da y que debería haberse acordado en un auto. Entre medias, meses de "silencios y tardanzas" en resolver los recursos que continuamente presentaban los imputados y una declaración de secreto de sumario por la "única razón" de que le resultaba "molesto o irritante el ejercicio de derecho de defensa".

Mientras, el presidente de la sala que le juzgó, Arturo Beltrán, ha emitido un voto particular en el que defiende la absolución de Silva, porque aunque la instrucción que llevó a cabo es, "en su conjunto, sumamente irregular", no encaja en conductas tipificadas en el Código Penal. "Si una conducta, por deplorable que sea, puede explicarse al margen del derecho penal, la conclusión es que debe dictarse sentencia absolutoria", concluye. EFE

Peticiones de condena más elevadas

El titular del Juzgado de Instrucción número 9 de Madrid se enfrentaba a una petición fiscal de 30 años de inhabilitación; mientras que el banquero solicitaba que fuera condenado a una pena de 40 años y el ex presidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, requería que no pudiera trabajar en la Administración de Justicia durante 24 años.

Silva, que ha abierto un despacho de abogados, investigó a Blesa por el crédito de 26 millones de euros concedido al ex jefe de la patronal Gerardo Díaz Ferrán y por la compra del City National Bank de Florida llevada a cabo en abril de 2008 por Caja Madrid. Esta es la única causa que continúa abierta en los Juzgados de Plaza de Castilla después de que la otra fuera anulada por la Audiencia de Madrid.

Silva ordenó en noviembre de 2012 reabrir las actuaciones que se incoaron después de que Manos Limpias presentara una querella contra Blesa y Díaz Ferrán, que el juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu rechazó acumular a la causa abierta por la fusión y salida a Bolsa de Bankia.

El juez intervino los correos electrónicos corporativos de Blesa y le envió a prisión el 16 de mayo de 2013. Tras haber pagado la fianza de 2,5 millones, el magistrado ordenó de nuevo y en menos de un mes su vuelta a la cárcel madrileña de Soto del Real. Blesa permaneció quince días y dijo al salir: "Quiero un juez imparcial".

Mostrar comentarios

Códigos Descuento