Los salarios medios de las cúpulas empresariales españolas superan con creces los salarios más altos de la clase política. Y es que de media los consejeros de las empresas del Ibex-35 percibieron en 2013 unas retribuciones —sueldos y dietas— por persona de 490.000 euros, un 4,2% menos que un año antes, tal como muestra un reciente informe publicado por la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Aún así, es seis veces más de lo que cobra el presidente del Gobierno (Mariano Rajoy cobra 78.135 euros anuales) y casi el doble de la asignación pública que percibe el rey (unos 292.000 euros).

Especialmente alta es, en comparación con los más altos cargos políticos, la remuneración media de los máximos responsables empresariales: Los presidentes ejecutivos de las 35 mayores entidades cotizadas recibieron el pasado año un salario medio de 2,4 millones de euros (3,1 millones cuando existe además el puesto de consejero delegado). Es decir, casi 31 veces más alto que el sueldo del presidente del Ejecutivo.

En su conjunto, cada consejo de administración de las grandes empresas españolas ganó en 2013 más de 6,7 millones de euros, según los datos recopilados por la CNMV, que destaca que el "principal" criterio para determinar lo que gana cada miembro del mismo es "el nivel de responsabilidad del cargo". Así, frente a los hasta 3,1 millones de euros de los presidentes ejecutivos, el resto de consejeros ejecutivos perciben de media menos de la mitad (1,6 millones), mientras que los consejeros sin responsabilidad directa en la gestión alcanzan una cantidad notoriamente menor: 172.000 euros.

Frente al tópico de que lo que ganan estos altos cargos se corresponde con su valor de mercado y con lo que son capaces de generar, lo cierto es que sus sistemas retributivos están en general configurados para que el grueso del salario sea fijo (un 55%), frente a un 34% que corresponde a remuneraciones variables (acciones, opciones...) y un 6% de dietas. El resto de la masa salarial, corresponde a indemnizaciones u otros conceptos.

Pero, ¿se merecen por tanto esos sueldos medios tan altos? La propia CNMV parece insinuar que no, ya que según ésta "no se percibe una clara conexión directa entre los resultados financieros de las compañías y el nivel de retribución de sus consejeros", concluyen.

Aparentemente ajenos a la crisis sufrida en el sector, y al igual que en años anteriores, es el sector financiero el que en España mejor retribuye a sus cúpulas. En 2013, los principales bancos y cajas emplearon una media de 657.000 euros para cada remuneración de un consejero. Sin embargo, los datos muestran una media, que no refleja sin embargo la notable dispersión que hay entre los salarios de las cúpulas entidades grandes y de las entidades pequeñas.

Así, las compañías con una capitalización bursátil de más de 20.000 millones de euros remuneran, de media, con más de 1,1 millones de euros a cada uno de sus consejeros. Sin embargo, una entidad de mediana capitalización (de 10.000 a 20.000 millones) emplea menos de la mitad: 415.000 euros de media por persona. Como ejemplo: El BBVA pagó en 2013 más de 1,8 millones de euros a sus consejeros ejecutivos, mientras que el Banco Sabadell apenas superó los 923.000 euros anuales de media.

Mención aparte (porque no es del sector bancario) merece el caso de Inditex. La multinacional del textil dueña de marcas como Zara o Pull&Bear gastó el pasado año más de 3,2 millones de euros en remunerar a sus primer ejecutivo: Pablo Isla, presidente desde 2011, cuando el fundador de la compañía, Amancio Ortega, le cedió el testigo.

Los datos de la CNMV muestran además que la igualdad de sexos está lejos de alcanzarse en el mundo de la gran empresa: Apenas un 16% por ciento de los miembros de los consejos de administración de las principales compañías españolas son mujeres. Este porcentaje, aunque ha mejorado en el último año —1,4 puntos porcentuales desde octubre de 2013— sigue muy lejos de una paridad real y por debajo también de la media europea (18,6% de consejeras).

La desigualdad es aún mayor cuanto mayor es la responsabilidad de los altos cargos. Así, apenas un 3% de los consejeros delegados en Europa son mujeres. Recientemente Ana Patricia Botín fue nombrada presidenta de Banco Santander, en lo que fue el primer nombramiento de una mujer como máxima responsable de un gran banco en España.