Una familia con hijos con una renta media de 2.000 euros al mes invierte un 6,24% de sus ingresos en transporte público.

Ante estos datos, la Síndica de Greuges de Barcelona , Pilar Malla, ha reclamado a la Autoritat del Transport Metropolità "una tarifa reducida o que se amplíe la edad de gratuidad para los niños", que ahora es de cuatro años.

Es el mismo baremo que se aplica en ciudades como Madrid y Zaragoza, aunque en Bilbao el billete es gratis hasta los cinco años y en Valencia, hasta los seis. En Sevilla, sólo es hasta los tres.

La ATM, afirma la Síndica, considera que los niños no viajan solos y que, en su momento, ya se creó la T-Familiar, donde cada viaje tiene una reducción del 50% del importe del billete sencillo y que sale más a cuenta que la T-10.

Queja de los padres

La demanda de la Síndica, efectuada a partir de la queja de un ciudadano, llega tras constatar que la T- Familiar "no representa una bonificación de la tarifa de los menores" y "es difícil que se beneficien familias monoparentales".

Las que tienen dos o más hijos "no tienen ningún incentivo para viajar en transporte público". De hecho, el gasto medio puede suponer 124,80 euros al mes y "grava especialmente a las familias con rentas más bajas".

Descuento según la renta

La Síndica propone descuentos en función de los hijos y de los ingresos, y recuerda que hay rebajas o gratuidad para los mayores de 60 años y que ya se ha ampliado la edad para utilizar la T-Jove. Por eso, ahora pide el mismo trato para los niños.

La Síndica de Greuges constata que en Berlín los escolares y los menores de seis años tienen descuentos especiales; en Roma, los menores de 10 años no pagan en la mayoría de líneas si van acompañados de un adulto; en París, de cuatro a 10 años tienen una reducción del 50%; en Londres, los niños y niñas menores de 11 años viajan gratis, precisamente, desde este mes de abril.

Además, en París, las familias numerosas viajan con billetes un 50% más baratos y, en Roma, hay descuentos especiales.