El exvicepresidente de la Diputación de Castellón y alcalde de Vall d'Alba, Francisco Martínez, imputado por la tramitación de los terrenos de la depuradora de Borriol, ha asegurado este martes que ha renunciado a su acta de diputado por "respeto y coherencia" con las directrices del PP y de su presidente provincial, Javier Moliner.

Martínez, que se ha expresado así por alusiones durante su intervención en un pleno extraordinario de la Diputación, en el que se ha aceptado su renuncia, ha insistido en que "siempre" ha actuado dentro de la legalidad y a favor de los intereses públicos, y ha asegurado que los hechos "demuestran" que su gestión ha sido "imparcial y ecuánime" en todos los municipios de la provincia.

El exvicepresidente de la institución provincial ha comenzado su alocución mostrando su agradecimiento a la Diputación y los ciudadanos por haberle "permitido" desarrollar su labor política durante estos años, una etapa a la que —según ha dicho— "pongo fin de forma absolutamente voluntaria por respeto y coherencia a las directrices marcadas por mi partido y mi presidente".

Según ha dicho, la tarea desarrollada ha sido "gratificante", y ha vuelto a agradecer la "confianza" depositada en él durante dos décadas en el área de infraestructuras y cooperación, así como en el resto de funciones que le han sido encomendadas. Así mismo, ha agradecido a los funcionarios de la Diputación su "eficiente" trabajo, así como el "apoyo y amistad" de sus compañeros, de los que -ha dicho- "he ganado sólidas amistades".

Asimismo, ha destacado la "colaboración" de los alcaldes de los pueblos de la provincia y su "apoyo constante", y ha añadido que "los hechos demuestran que mi gestión ha sido imparcial y ecuánime en todos los municipios". Ha apuntado que, a pesar de que deja el escaño, se siente "afortunado" de seguir como alcalde de Vall d'Alba, donde ha dicho que continuará trabajando "por y para mis vecinos".

"me marcho contento"

"Me marcho contento, consiente de que mi trabajo ha hecho posible que se cumplan muchas de las demandas de los castellonenses. Me marcho con la convicción de haber actuado siempre dentro de la legalidad y a favor de los intereses públicos", ha concluido.

Preguntado al finalizar el pleno si volverá a presentarse como candidato a la alcaldía de Vall d'Alba, Martínez ha remitido a los medios de comunicación a su intervención durante la sesión, en la que no se ha referido a esta cuestión. "Yo ya he dicho todo lo que tenía que decir y hoy quiero terminar con las palabras de mi intervención en el pleno, y si hay alguna cuestión, ya hablaremos", ha dicho al respecto.

Durante el debate de este punto, el portavoz del grupo socialista, Francesc Colomer, ha asegurado que lo "correcto" sería que Martínez "tomara la palabra y explicara las causas de su renuncia, ya que no se ha caracterizado por su voluntad de dar la cara y explicar". Así mismo, ha pedido explicaciones sobre si el exvicepresidente de la Diputación "ha dimitido o es Moliner el que ha forzado la cuestión".

"Estamos ante un caso muy desagradable en términos de salud democrática, pues significa aprovecharse del cargo para enriquecerse y, si no se nos explica otra cosa, estamos ante un comportamiento corrupto, en el que se confunde lo público con lo privado y lo particular con lo general", ha apuntado el socialista, quien se ha preguntado si "ha sido un hecho aislado en el que se ha actuado por casualidad o ha sido un 'modus operandi' durante 20 años".

En este sentido, ha insistido en que el presidente de la Diputación, Javier Moliner, "tiene que generar tranquilidad y seguridad jurídica, así como garantía de que esto no ha pasado nunca más", por lo que le ha propuesto articular un mecanismo de investigación al respecto, "pues estos casos ahuyentan las inversiones y degradan la política y la institución".

Por su parte, el portavoz de Compromís, Enric Nomdedéu, ha mostrado su preocupación respecto a que "ni el alcalde de Borriol ni esta Diputación hayan tenido mecanismos de control para detectar el caso", y ha destacado que "hay que evitar que una cosa así pueda pasar en el futuro".

Línea roja

El portavoz del PP en la Diputación, Miguel Barrachina, ha respondido a la oposición recordando que el partido ya dijo que no tendrá ningún diputado imputado por causas relacionadas con enriquecimiento personal o familiar, "y esto es una línea roja evidente". Así mismo, ha afirmado que la cuestión de Martínez no ha sido un "modus operandi". "Esto no es Andalucía ni el PSOE, ni hay 240 imputados que han sido ministros y presidentes de comunidades autónomas, y da la sensación de que aquello sí lo era".

"En la Diputación las líneas rojas están muy claras, mientras que otros partidos tienen agujeros negros que deberían aclarar", ha manifestado Barrachina, quien ha recordado que en el caso de Martínez "se paralizó el acuerdo del pleno, no se aprobó la adquisición de los terrenos y se llegó más lejos que nunca".

En el segundo turno de palabra, Colomer ha subrayado que lo "fácil" para él hubiera sido "hacer una retahíla de los imputados en la Comunitat Valenciana", y ha recriminado al PP no haber dedicado ni "un segundo" a defender a Martínez "ni en la presunción de inocencia".

"Le han sentenciado ya, pues aceptan que su intención era aprovecharse de un cargo para enriquecerse personalmente", ha indicado el portavoz del grupo socialista, quien se ha preguntado si Martínez es bueno para ser alcalde "si no es bueno para estar sentado aquí y le han tratado como un corrupto".

Finalmente, Barrachina ha negado "dar por hecho" que Martínez se haya enriquecido personalmente, "pues es imposible, ya que la operación jamás tuvo lugar y es innecesario que un demócrata como yo presuma su inocencia. Los que le atribuyen un enriquecimiento son ustedes", ha señalado.

Al respecto, ha insistido en que "es imposible que con la depuradora de Borriol se haya enriquecido nadie, por lo que estamos juzgando intenciones". "Hace muy bien la oposición en fiscalizar todo, pues es su obligación", ha concluido.