La Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología (FECYT) y la embajada de España en Italia animan a los científicos e investigadores españoles residentes en el país transalpino a integrarse en una comunidad que sirva de plataforma para el intercambio de información en dichas materias.

Lo que se persigue es crear una comunidad que aúne a los profesionales que desarrollan su labor en el extranjero mediante este tipo de asociaciones con fines científicos y sin ánimo de lucro.

La propuesta tuvo lugar en la residencia del embajador español en Italia, y  y en el que intervinieron el propio diplomático, Francisco Javier Elorza Cavengt, y el director general de la FECYT, José Ignacio Fernández Vera.

A la cita acudieron un total de catorce científicos españoles que actualmente desarrollan su actividad laboral en Italia, vinculados a todas las áreas del conocimiento y procedentes de diversas universidades e instituciones de investigación.

"Queremos ser los instigadores y los que invitemos a los científicos españoles en Italia a que formen una comunidad que pueda ser identificada por parte de la sociedad de nuestro país", explicó Fernández Vera.

Asimismo, añadió para recalcar la importancia de la iniciativa, que "la parte más efervescente y activa de la ciencia es producida por los científicos que están fuera de su país", que se encuentran en lo que el directivo denominó "diáspora".

Los científicos presentes en el acto mostraron una acogida muy positiva al proyecto y, en su mayoría, lo calificaron como una iniciativa "excepcional e "indispensable".

En esta línea, José Alejandro Heredia Guerrero, doctor en Química e investigador en el Instituto Italiano de Tecnología de Génova (IIT), apuntó que esta puede ser una "gran oportunidad para potenciar la llegada de nuevos científicos españoles a Italia".

"El instituto donde trabajo está muy interesado en contratar a profesionales procedentes de otros países y esta puede ser una gran plataforma, especialmente para los científicos españoles", matizó.

Por su parte, Gina de la Fuente Mancebo, investigadora de Ecología Marina en la Universidad de Estudios de Génova, contempló la creación de la comunidad como "una posibilidad muy interesante de trabajar de forma multidisciplinar".

Con anterioridad, la embajada de Italia en España ya promovió un proyecto similar para fomentar los vínculos entre sus científicos y dar visibilidad a su labor.

La primera comunidad científica española en el extranjero se fundó en junio de 2011 en Reino Unido, seguida por las de Alemania, Suecia, Estados Unidos, Dinamarca, Australia, Japón, Singapur y ahora Italia.