Esta estrategia surgió en Estados Unidos bajo el nombre de vanity sizing (tallaje de vanidad), aunque ahora ha dejado de ser práctica exclusiva de la moda femenina para aplicarse a la masculina.
El hallazgo del rotativo ha sorprendido al sector de la moda. El diseñador Jeff Banks aseguró que los procesos de fabricación pueden dar una diferencia de 2,5 a 5 centímetros entre etiqueta y realidad. Pasar de este límite, según Banks, parecería un intento de hacer pensar al cliente que es más delgado de lo que es.
Las firmas afectadas aseguran que no mienten y desde Zara indican que la talla de sus prendas debería ser la misma que se indica en las etiquetas.
En busca de la medida frecuente
El Ministerio de Sanidad encargó a finales de enero un estudio antropométrico para conocer las medidas corporales más frecuentes de las españolas para homogeneizar las tallas de la ropa. El Gobierno acordó con diseñadores y empresarios adaptar el canon estético femenino a la realidad.
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios