Sarah Forsyth, empleada del elitista centro inglés de Eton hasta elverano de 2003, afirmó que el príncipe era visto como un estudiante"flojo" que necesitaba ayuda para pasar sus exámenes de acceso a la universidad.

Anteun tribunal británico, la profesora aseguró que algunos de los dibujosque el joven presentó en su asignatura de arte y que después sepublicaron en la prensa eran en realidad obra del jefe del departamentode Arte, Ian Burke.

Además,

la enseñante admitió haberle ayudado en su prueba escrita:"He visto por primera vez extractos del material presentado por elpríncipe Enrique y puedo confirmar que la mayoría fueron escritos pormí".

A Forsyth no le renovaron su contrato en Eton por motivos referentes al desempeño de su trabajo, pero ella

alega que "hubo otras razones", como el "jaleo sobre el príncipe Enrique", hijo del príncipe Carlos y la fallecida Diana de Gales.

La Familia Real británica ha negado las acusaciones y defendido que el príncipe pasó esos exámenes sin hacer trampas.