«Lo han convertido en una disputa de partido. Por su situación junto a la catedral pienso que debería tener un uso cultural, aunque la consejera de Justicia lo ha tomado como una victoria personal, cuando alcaldes del PSOE, como Moratalla, también defendían la idea del museo. Al final la discusión es entre políticos y se olvidan de los ciudadanos».

Carmen Casas. Ama de casa. 55 años.

«Mejor que lo usemos todos los granadinos. No sé si es mejor hacer un museo, un teatro o un casino, pero creo que debería ser un edificio que estuviera abierto a todos los granadinos, porque a la Escuela de Fiscales sólo irán los fiscales, digo yo, y estando como está en la Gran Vía, que cada vez la han puesto más bonita, preferiría que todos lo usáramos».

Jose F. García. Estudiante. 25 años.

«No hay una oferta de museos para la ciudad. Por el tipo de edificio que es, yo opino que un museo podría estar muy bien; además, no hay oferta de museos en Granada y creo que hacen mucha falta para la ciudad. También porque en el sitio en el que está ubicado sería una buena forma de atraer al turismo con iniciativas culturales».

Aberto Fernández. Profesor universitario. 60 años

«La Escuela de Fiscales es una buenísima idea. Es lo mejor que pueden hacer. Granada necesita un espacio museístico, pero mucho más ambicioso que eso que, al fin y al cabo, no es más que un banco. Tampoco han dicho de dónde saldrían los fondos del museo o si sería etnográfico o qué. Más vale pájaro en mano y el gran museo, a la periferia».

Miguel Á. González. Administrativo. 29 años.

«La escuela será un referente para la ciudad. Creo que el proyecto de la Escuela de Fiscales se convertirá en un referente de la ciudad en el terreno judicial, mientras que la idea del museo ni siquiera estaba clara ni definida. No hubo una propuesta seria de para qué lo querían exactamente o qué tipo de museo iban a hacer. A mí no me convence».

Isabel Martín. Intérprete. 28 años.

«Debería ser un espacio abierto a la creación. A mí me parecería más útil si fuera un espacio abierto a los creadores y no un museo sólo. Creo que se necesitan lugares para que los artistas ensayen, pinten o hagan música. Deberían haberlo ocupado hace años o si no, tirarlo y hacer un jardín con árboles, que también faltan más zonas verdes».