El delegado del Gobierno, Joan Rangel, pidió ayer a los inmigrantes sin papeles que «se vayan a su país y regresen a España con un contrato de trabajo», ya que, si no lo hacen así, «serán expulsados». La mayoría de peticiones recogidas serán aceptadas.

«Falsas promesas»

Rangel denunció que «hay un colectivo, sobre todo, pakistaníes», que han llegado a última hora «con falsas promesas». Éstos «son los que han protagonizado los encierros», «los que colapsaron el Ayuntamiento para pedir el empadronamiento por omisión» y los que hicieron cola a última hora en las oficinas de extranjería «sin la documentación necesaria». Medio millar de sin papeles se manifestaron ayer en Barcelona  como medida de protesta.

700.000 peticiones en toda España

En España se han presentado 691.059 solicitudes, 200.000 ya resueltas (recuento a las 22 h. del sábado). Los regularizados aportarán 1.500 millones de euros a la Seguridad Social. El Gobierno calcula que 100.000 se han quedado fuera del proceso (según el PP, un millón).