Al menos siete personas han resultado heridas por el descarrilamiento de un tren de pasajeros cerca de la localidad suiza de Tiefencastel, a menos de 50 kilómetros de Saint Moritz, según han informado los medios locales.

El descarrilamiento se produjo por un deslizamiento de tierras que había bloqueado las vías. A bordo del convoy, operado por Rhaetian Railway, viajaban unas 200 personas, siete de las cuales habrían sufrido heridas. El impacto provocó que descarrilaran tres vagones, uno de los cuales quedó pendiendo al borde de un abismo, pero los pasajeros pudieron evitar su caída desplazándose a la parte posterior del vehículo para hacer contrapeso.

Las imágenes difundidas por los propios pasajeros mostraban uno de estos vehículos estrellado contra la montaña. El servicio de rescate aéreo Rega ha enviado dos helicópteros al lugar, aunque los trabajos en la zona son complicados debido a las características del terreno.

Los equipos paramédicos que han llegado al lugar están tratando a los pasajeros en estado de shock.

Este hecho ocurre tres días después de otro accidente entre un tren y un minibus en el cantón de Nidwald, en el que murieron tres personas y otras cinco quedaron heridas.