El Juzgado de lo Penal número 15 de Sevilla ha condenado a tres años y ocho meses de prisión a Razvab B., de origen rumano, tras atropellar gravemente a una menor de 12 años, conocida por las iniciales A.M., en el mercadillo del Charco de la Pava y haberle causado diferentes lesiones físicas y psíquicas a dicha menor.

En la sentencia, a la que ha tenido acceso Europa Press, el Juzgado de lo Penal número 15 considera que el inculpado de los hechos es autor de un delito de conducción temeraria en concurso con un delito de lesiones imprudentes, por lo que Razvab B. ha sido acusado a tres años y ocho meses de prisión; doce meses de multa con una cuota diaria de dos euros y nueve años de privación del derecho a conducir vehículos de motor y ciclomotores con la pérdida de su licencia de conducción.

El Juzgado considera probado que el 25 de septiembre de 2011, sobre las 14,45 horas, el inculpado acudió al mercadillo sevillano, lugar donde, tras bajarse de su vehículo, protagonizó un altercado con determinadas personas en uno de los puestos.

Tras esto, el inculpado volvió a ponerse a los mandos del automóvil arrancando bruscamente contra parte del puesto de las personas con las que había discutido, para luego dar marcha atrás de forma también brusca y llegando a impactar en otro puesto del mercadillo.

De esta manera, y a consecuencia de esta colisión, se produjo el atropello de la menor A.M. que quedó atrapada debajo del vehículo mientras el acusado sin pararse para cerciorarse de lo que había ocurrido emprendía la marcha, de nuevo, a gran velocidad.

Así, a efecto de tales hechos la menor necesitó de 590 días —de los que 26 fueron con ingreso hospitalario— para recuperarse, constando como secuelas diferentes afecciones como el estrés postraumático, la neuralgia intercostal izquierda, la limitación en los últimos grados de flexión en ambas rodillas o las irregularidades en rodilla y pierna derecha, entre otras.

En un primer momento, la Fiscalía pidió una pena de tres meses de prisión por el delito contra la seguridad vial. Por el delito de lesiones imprudentes en concurso con el de conducción temeraria solicitó 20 meses de prisión y la privación del derecho a conducir por cuatro años, y por el delito de omisión del deber de socorro demandó la pena de dos años de prisión.

De su lado, el abogado que ejerce la acusación particular solicitó la pena de cuatro años de prisión y la privación de conducir por diez años por el delito de conducción temeraria; seis meses de cárcel por el delito contra la seguridad vial; otros cinco años de prisión por el delito de lesiones; y por el delito de omisión del deber de socorro solicitó la pena de una multa de diez meses con una cuota diaria de diez euros y un delito de daños.

Retraso del juicio

El juicio, que tuvo lugar el pasado 29 de julio, fue objeto de retraso ya que estaba previsto que comenzara a las 10,30 horas pero no pudo empezar hasta aproximadamente las 12,45 horas, "una situación que se podría evitar", ha indicado a Europa Press el letrado de la acusación particular, José Ignacio Francés.

De esta manera, el letrado ha mostrado su descontento manifestando que "poner un juicio que consta de un gran número de testigos y que precisa de una hora y media de tiempo para que transcurra no se puede poner 30 minutos antes que otro".

Además, aparte del retraso en el juicio, no pudo declarar la menor "habiendo solicitado su testificación con tiempo al proceso", por lo que la acusación particular ha anunciado que recurrirá esta sentencia.