El programa de alquiler del Ministerio de Vivienda no funciona en la ciudad. Sólo 60 coruñeses figuran como inquilinos de esta iniciativa, que se puso en marcha en octubre de 2005.

«No se han cumplido las expectativas», dicen desde la inmobiliaria Carballido, una de sus promotoras. Esto se evidencia comparando los resultados con la Bolsa de Aluguer de la Xunta, que tiene en A Coruña y comarca 1.036 contratos en vigor y 94 viviendas a las que aspiran 218 solicitantes.

Una lista de espera que es el polo opuesto al de la Sociedad Pública del Alquiler (SPA) –denominación oficial del programa estatal– que  tiene 200 inmuebles vacíos en A Coruña y la comarca.

Culpan a la Xunta

La disparidad en la demanda se debe a tres factores: la falta de información, los exigentes requisitos para ingresar en la SPA y «la falta de colaboración de la Consellería de Vivenda», según los promotores de la bolsa estatal.

Desde la inmobiliaria Finferco, otra de las intermediarias de la SPA en A Coruña, critican que «la Xunta no permite utilizar las ayudas de su Bolsa de Aluguer en nuestro programa, y eso que estaba acordado». La Consellería de Vivenda responde que tal acuerdo «era sólo un protocolo» y que «no se aplica porque la SPA no favorece el acceso a un piso a personas con rentas bajas».

Sin la posibilidad de hacer uso de ayudas autonómicas –que financian hasta un 60% de la renta–, los pisos estatales sólo ofrecen como ventaja ser un 20% más baratos que el precio de mercado. Por lo demás, los requisitos son tan elevados que ahuyentan al inquilino.

Al solicitante se le exige  un aval equivalente a cuatro meses del alquiler y que el 30% de los ingresos del solicitante se pueda destinar al piso. Este último aspecto es común a ambos programas, pero la Xunta tan sólo requiere al inquilino la entrega de una fianza de un mes y le garantiza que no pagará más de 450 euros de renta.

Los dos programas

Alquiler estatal (SPA)

Así funciona

La SPA delega en inmobiliarias. En A Coruña hay cuatro: Finferco, Dial, Corral y Carballido. El solicitante escoge de la bolsa de pisos disponible el que más se adapte a sus necesidades, sin esperas.

Requisitos

El 30% del sueldo debe equivaler a la renta del piso. Antes de ocuparlo hay que entregar un aval por cuatro meses del alquiler. No hay límite de ingresos, por lo que cualquiera puede solicitar piso.

Beneficios

Las viviendas son hasta un 20% más baratas que el precio de mercado. Son pisos sin límite de renta –valen de 300 a 1.000 euros–, por lo que hay más oferta. La entrega al inquilino es inmediata.

Propietarios

El propietario cuenta con el cobro de cinco años de renta aunque el piso esté desocupado. La vivienda queda asegurada al instante, con lo que los arreglos son sufragados por el Ministerio de Vivienda.

Bolsa de Aluguer

Así funciona

Depende del Instituto Galego de Vivenda e Solo. Al inscribirse, uno entra a formar parte de un registro y es la Xunta quien asigna el piso, que sólo puede ser rechazado dos veces o se pasa al final de la lista.

Requisitos

Sólo pueden apuntarse las personas cuyos ingresos no superen los 1.200 euros al mes. No se pide aval, pero sí que el 30% del sueldo pueda destinarse a pagar lo que cuesta ocupar el inmueble.

Beneficios

Los pisos de la Xunta tienen un precio máximo de 450 euros al mes. Además, la Consellería de Vivenda ofrece subvenciones de entre el 30% y el 60% del precio de los alquileres de los inmuebles.

Propietarios

Los dueños de los pisos reciben ayudas de hasta 6.000 euros a fondo perdido para rehabilitación. Cobrarán durante cinco años estén o no ocupadas las viviendas y tendrán seguros a todo riesgo.