Una persona murió este lunes en Jerusalén y al menos cinco resultaron heridas en un atentado perpetrado por un palestino de la aldea de Yabel Mukabar, en la parte este de Jerusalén, informaron fuentes policiales. Además, un soldado israelí resultó herido de gravedad como consecuencia de los disparos efectuados por un motociclista en las inmediaciones de la Universidad Hebrea de Jerusalén, en la parte este de la ciudad, informó la Policía.

El palestino que presuntamente dirigió el atentado empleó una excavadora para volcar un autobús de línea en una céntrica calle de la ciudad santa, antes de ser abatido por tres agentes de seguridad que estaban en el lugar.

"El terrorista salió de una obra y atropelló a un viandante. Después embistió con la pala del tractor a un autobús y lo volcó", dijo a los medios el jefe de la Policía de Jerusalén, Yosi Pariente.

La víctima, de 25 años, resultó herida de gravedad, y murió mientras era atendido por los servicios de emergencia que se desplazaron al lugar de los hechos. Testigos relataron que el tractor recorrió unos 150 metros antes de embestir al autobús y que se llevó por delante todo lo que había en su camino. Según una fuente policial citada por el Canal 10, el agresor tenía expediente delictivo por haber presuntamente tomado parte en actividades nacionalistas ilícitas.

Los heridos son el conductor del autobús, tres pasajeros y uno de los tres agentes que abatieron al atacante.

Según Pariente, los tres se encontraban en la zona de casualidad y al ver lo que ocurría se bajaron de sus vehículos y dispararon al conductor del tractor, identificado como Muhamad Naif Yabis, residente en una aldea palestina del sureste de Jerusalén.

Su familia es interrogada ahora por agentes del servicio secreto israelí para saber si se trata de un acto individual o de algún tipo de atentado a petición de alguna organización armada, según el servicio de noticias Ynet.

"Estábamos advertidos sobre este tipo de incidentes desde que comenzó la operación 'Margen protector'", reconoció el ministro de Seguridad Interior, Itzhak Aharonovich, al referirse a la ofensiva militar que su país lanzó el pasado 8 de julio en la franja de Gaza.

Los ataques con tractores y excavadoras fueron comunes en la ciudad santa, donde conviven israelíes y palestinos, alrededor del año 2008, cuando se produjeron varios sucesos parecidos en la principal calle de la ciudad.

La operación militar, en la que han muerto más de 1.800 palestinos y 60 israelíes, está provocando unas gran tensión entre las dos comunidades, así como enfrentamientos en Jerusalén este y Cisjordania entre manifestantes palestinos y las fuerzas israelíes de seguridad.

Mientras una ambulancia se llevaba el cadáver del atacante palestino, jóvenes israelíes corearon eslóganes racistas y aplaudieron la acción de los agentes de seguridad. Los ataques con tractores y excavadoras fueron comunes en la "ciudad santa", donde viven israelíes y palestinos, en el año 2008, cuando se produjeron varios sucesos parecidos en la principal calle de la ciudad.

"Se ha evitado un gran atentado", afirmó el alcalde de Jerusalén, Nir Barkat, que instó a ambas comunidades a "no tomarse la justicia por su mano".

También este lunes, un policía israelí resultó herido de gravedad como consecuencia de los disparos que efectuó un motociclista en los alrededores de la Universidad Hebrea de Jerusalén, en la parte este de la ciudad, informó un portavoz de la policía.

El atacante, que ha sido detenido tras una persecución, huyó a Wadi Jozz, una zona palestina de la ciudad, lo que hace creer a la Policía que pueda tratarse de un atentado de carácter nacionalista.

La ofensiva israelí en Gaza, de cuyo comienzo se cumplen cuatro semanas continuó con menor intensidad que en días precedentes y en medio de informaciones que apuntan a un próximo alto el fuego, en paralelo al aumento de la tensión en Jerusalén. Durante la jornada continuó el goteo de víctimas en ataques israelíes en la franja palestina, que ya registra 1.865 fallecidos y 9.400 heridos, en su mayoría civiles, desde el inicio de la ofensiva militar israelí Margen Protector, el 8 de julio.