El vicesecretario de Economía del PP-A, José Enrique Fernández de Moya, ha acusado este jueves a la consejera de Hacienda y Administraciones Públicas, María Jesús Montero, de "no creer en la recuperación" y de seguir "ahogando" a los andaluces con impuestos.

En un comunicado, Fernández de Moya ha dicho que las estimaciones de la Consejería reflejan un "profundo desconocimiento de sistema tributario y, lo que es más lamentable, una falta de confianza en la capacidad de los andaluces para reactivar nuestra economía".

El dirigente 'popular' se ha pronunciado así después de que Montero haya afirmado que la propuesta de reforma fiscal y tributaria en la que trabaja el PP-A "va a beneficiar a unos pocos de andaluces, los más ricos, y va a perjudicar a la mayoría de los ciudadanos como usuarios de los servicios públicos".

Fernández de Moya se ha preguntado por qué al Gobierno andaluz "le molesta tanto" que el PP-A quiera bajar los impuestos a los andaluces, "fundamentalmente a los que tienen menos renta, lo que propiciará que tengan más dinero en el bolsillo y se pueda reactivar el consumo y la creación de empleo".

Fernández de Moya, que ha asegurado que el PP-A no va a consentir que los andaluces sean los españoles que soportan mayor presión tributaria, ha afirmado que el Gobierno andaluz "trata de tapar con demagogia la injusticia de que los andaluces pagamos más impuestos que nadie".

Tras recordar que fue el PSOE el partido que suprimió el Impuesto de Patrimonio en España, "el impuesto de los ricos por excelencia", ha advertido a Montero que "no puede dar lecciones" y ha criticado que el gobierno bipartito "incremente los impuestos de forma indiscriminada, cobrando por ejemplo un canon del agua que paga igual un millonario que un parado".

El vicesecretario de Economía del PP-A ha afirmado que, por el contrario, el Gobierno del PP ha hecho una reforma para bajar impuestos a todos los españoles pero "fundamentalmente a los que tienen menor capacidad económica y menos renta".

Así, ha destacado que quienes ganen menos de 12.000 euros no tienen que tributar y quienes ganen entre 12.000 y 18.000 tendrán una rebaja del 30 por ciento, recordando también el carácter social de la reforma fiscal del gobierno con deducciones específicas para madres trabajadoras, familias numerosas y personas con discapacidad.