Un hombre se enfrenta a la pena de 20 años y medio de prisión por incendiar la casa en la que se encontraba su hijo menor, en la urbanización 'Las Ciñuelicas' de Orihuela Costa (Alicante), a cargo de una canguro. El incidente se produjo después de que la pareja discutiera y él le amenazara.

Así consta en el relato provisional del ministerio fiscal, que acusa al hombre de un delito de incendio con peligro para la vida o integridad física de las personas, un delito de daños provocados por el incendio y un delito de daños.

El hombre se ha sentado este martes en el banquillo de los acusados en la sección primera de la Audiencia Provincial de Alicante, y se ha acogido a su derecho a no declarar. Previamente ha renunciado a su abogado, y mientras tanto se ha solicitado la suspensión del juicio, pero tanto el tribunal como la Fiscalía se han negado porque esta cuestión se ha planteado fuera de plazo.

Así, ha comenzado la vistas por unos hechos que ocurrieron en la madrugada del 31 de octubre de 2013, según ha relatado la exmujer del procesado, que sí ha testificado. Ha explicado que tras siete meses separados, habían vuelto a convivir en la misma casa aunque "no de manera marital".

Esa noche, la mujer le comentó que iba a ir a cenar con unos amigos y el hombre, "molesto", se fue de casa. Una circunstancia que obligó a la mujer a llevarse al menor a casa de los amigos donde quedó, junto a los hijos de aquéllos, bajo la custodia de una chica de 17 años que hacía de canguro y a la que advirtieron de que no abriera la puerta a nadie si preguntaban por el menor.

La mujer ha afirmado que a partir de entonces el hombre la llamó reiteradamente preguntándole "por qué su mujer e hijo no estaban en casa" y la amenazó por teléfono diciéndole que "iba a quemar a su hijo y él mismo para que yo tuviera la vida que deseaba". Una amenaza a la que restó importancia después de comentarlo con los amigos, que le dijeron que se lo decía para que volviera a casa.

Sin embargo, un cuarto de hora más tarde recibieron la llamada de la Guardia Civil indicándoles que la casa en la que estaban los menores estaba en llamas, aunque ninguno de ellos sufrió daños porque salieron por la parte de atrás.

La mujer también ha explicado que el hombre quemó su vivienda y dañó su coche y que la llamó para decirle que "se lo merecía" y que "por eso había pasado".

Esquizofrenia paranoide

La mujer ha manifestado que conocía la enfermedad de su exmarido —supuesta esquizofrenia paranoide— "desencadenada porque fumaba mucho cannabis", aunque "nunca había estado ingresado estando conmigo". No obstante, ha reconocido que sí dejó la medicación y que estaba incapacitado para trabajar por su enfermedad, que "no siempre veía riesgo" en su relación, a pesar de que "veía la vida diferente" al resto de la gente. Por ello, la mujer ha insistido en que llegó a hacer "cosas anormales para tener una convivencia con él".

La mujer, que ha renunciado a cualquier indemnización y a ser acusación particular, ha afirmado que "la familia nunca se interesó por el estado del hombre", a pesar de lo cual tras los hechos la mujer de su exsuegro le llamó para decirle que "se había autolesionado".