Oihane Orrio Rey, estudiante del Grado en Ingeniería Agroalimentaria y del Medio Rural en la Universidad Pública de Navarra (UPNA), ha proyectado el rediseño de los jardines del Centro Ramón y Cajal que Aspace tiene en la localidad de Cizur Menor.

Esta idea, que se ha desarrollado en coordinación con los trabajadores, la dirección y los usuarios de este centro, es la base del Proyecto Fin de Grado con el que Oihane Orrio ha culminado su titulación universitaria, según ha informado la UPNA en una nota.

El objetivo principal de este proyecto ha sido adecuar las instalaciones del Centro Ramón y Cajal a las necesidades de los usuarios a través de un diseño específico de los jardines exteriores y de diferentes patios interiores.

El Centro Ramón y Cajal, gestionado por Fundación Aspace Navarra Residencial (FANR), abrió sus puertas en el año 1983 y dispone de 90 plazas, de las cuales 30 son en la residencia. Este centro persigue favorecer el desarrollo de las capacidades de las personas con parálisis cerebral y afines mediante actividades integrales en un entorno adecuado y lúdico.

'Rehabilitación y ajardinamiento del Centro Ramón y Cajal' es el título de este Proyecto Fin de Grado, que ha sido tutorizado por María Jesús Laquidain, profesora del Departamento de Producción Agraria, y que ha contado con la colaboración de María Jesús Velas, profesora de Dibujo Técnico.

La idea de rediseñar los jardines del Ramón y Cajal surgió hace un año en unas Jornadas de Aprendizaje y Servicio promovidas por la Universidad en las que participó María José Aliaga, directora del centro.

Jardinería en el ámbito social

Este proyecto de jardinería en el ámbito social divide las actuaciones en tres espacios diferenciados y tiene como objetivo adecuar las instalaciones para que resulten más atractivas y útiles a las necesidades y deseos de los usuarios, tal y como se pone de manifiesto en la memoria del Proyecto Fin de Grado.

La primera de las zonas de actuación es el jardín de la residencial, donde se crea una zona ajardinada con especies vegetales de muchos colores y unos caminos que permitirán a los usuarios y familiares transitar libremente por el recinto. Este espacio se completa con la creación de una barbacoa con merendero de forma circular y con la rehabilitación de la actual pista de baloncesto en un parque urbano con columpios accesibles, mesa de juegos y otros elementos.

También se proyecta rehabilitar el entorno del Centro de Día, en la que se busca crear una zona de recreo modificando el acceso para crear una gran superficie ajardinada. Gracias a la nueva disposición de la entrada y a la ampliación del aparcamiento situado junto al jardín residencial, el acceso al centro desde esta parte del recinto se limitará a vehículos autorizados. El proyecto incluye la creación de tres plazas circulares, en una de las cuales se instalará, a petición de los usuarios, dos gallineros.

Por último, el Proyecto Fin de Grado también propone intervenir en los patios interiores ajardinados existentes en las edificaciones, de los cuales ocho se encuentran en la residencia y los dos restantes en el centro de día. Se propone renovar especies, pavimentar en algunos casos o crear zonas de actividades terapéuticas.

Los estudiantes de la Escuela Técnica Superior de Ingenieros Agrónomos cuentan con el asesoramiento de una oficina técnica para elaborar sus Proyectos Fin de Grado. Esta oficina está formada por diez profesores de diferentes especialidades que dan soporte técnico a los estudiantes cuando tienen dudas sobre alguno de los aspectos de sus trabajos. La ETSIA también se está planteando incluir una asignatura optativa sobre proyectos técnicos en el séptimo semestre de las titulaciones.

SENSIBILIDAD

La Escuela Técnica Superior de Ingenieros Agrónomos ha puesto en marcha en los últimos años diferentes iniciativas que buscan mejorar la formación de los estudiantes de sus titulaciones a través de la inclusión de competencias transversales y de experiencias de Aprendizaje y Servicio (APS). El objetivo final de este programa, impulsado por el director de la Escuela, Alberto Enrique, es que los estudiantes sean sensibles hacia colectivos vulnerables de la sociedad, según la UPNA.

En este sentido se enmarca el proyecto promovido en la Finca de Prácticas de la Escuela para cultivar hortalizas cuyo destino es el comedor social Paris 365. Estudiantes voluntarios de dos asignaturas del Grado de Ingeniería Agroalimentaria y del Medio Rural son los encargados de seleccionar las variedades, las fechas de plantación y del seguimiento.

El APS es una metodología de aprendizaje que permite al estudiante poner en práctica los conocimientos adquiridos en el aula y, al mismo tiempo, comprometerse con la sociedad y fomentar valores como la responsabilidad, la solidaridad y la participación.