Cada vez tenemos más quilos de los convenientes. La mitad de los adultos y el 28% de los niños vascos ya pesan más de lo que deben. Esto es peligroso: «Las personas obesas triplican el riesgo de padecer problemas cardiacos y duplican la posibilidad de tener hipertensión», explica el endocrinólogo del hospital de Cruces, José Antonio Piniés.

Las cifras están claras, y ahora son necesarias medidas para pasar a la acción.

Para ello, Piniés impartió ayer en Bilbao un taller dirigido a médicos de cabecera, los sanitarios más cercanos al paciente. Allí les dio nociones sobre cómo combatir la obesidad.

Dentro de las personas que llegan a las consultas con kilos de sobra, hay que hacer una diferencia. Por un lado, está el sobrepeso, que es menos grave, y que afecta al 16% de niños y adolescentes y al 36% de los adultos. Luego está la obesidad, que atrapa al 12% de menores y al 14% de adultos.

Esto ya es más peligroso: puede implicar enfermedades coronarias, artrosis, diabetes o un nivel excesivo de colesterol en sangre. Piniés aportó pautas a los médicos de familia sobre cómo hallar una dieta y una tabla de ejercicios personalizados a cada paciente con peso excesivo.

Sólo si el régimen y el deporte no funciona, hay que pasar a los fármacos. Existe la sibutramina, que atenúa el apetito, y el orlistato, que elimina hasta un 30% de las calorías a través de las heces. Con estos tratamientos se puede perder un 10% del peso, aunque es imprescindible la prescripción médica.

6 preguntas a...

José Antonio Piniés. endocrinólogo del hospital de cruces

1 ¿Niño obeso hoy, adulto obeso mañana? Anote el dato: si un niño pasa la pubertad y sigue siendo obeso, tiene un 90% de posibilidades de sufrir obesidad para el resto de su vida. Es algo que debemos tener en cuenta.

2 ¿Quién tiene la culpa del aumento de la obesidad? Son muchos factores los que entran en juego: la educación de los padres, las empresas alimentarias, los gobiernos... Se trata de que todos tomen conciencia.

3 ¿Qué deben hacer los padres? Pues enseñar a su hijo a tener una dieta sana y equilibrada. Todas estas costumbres de no desayunar, encargar una pizza para cenar... pueden provocar la obesidad en el niño. Además, esa persona coge unos vicios que ya no suelta en su vida.

4 Donuts, golosinas... ¿ni tocar? Hombre tampoco es eso. Hay que comer los menos posibles, pero no se trata de prohibir. Una pizza a la semana puede ser sano. Además, no toda la comida rápida es tan mala. ¿Qué me dice del bocata de jamón? Rápido, más sano y sabroso.

5 Cada vez tenemos más sobrepreso... ¿Pararemos? Si miramos los casos de los países de alrededor parece que no. En Inglaterra, la población obesa se ha duplicado en 10 años. Y en Estados Unidos un tercio sufre obesidad.

6 Dé algún consejo para prevenirlo. Comemos más de lo que necesitamos. Hay que compensar ese exceso energético con deporte. Media hora de caminata al día o 3 horas de deporte a la semana. Además, hay que regular la comida. Evitar grasas y dulces y conservar nuestra dieta mediterránea.