El alcalde de Tarragona, Josep Fèlix Ballesteros, exigirá responsabilidades al conseller de Interior de la Generalitat, Ramon Espadaler, por la "violencia gratuita" y la reacción tardía de los Mossos d'Esquadra en los incidentes al final del partido entre el Llagostera (Girona) y el Gimnàstic de Tarragona por el ascenso a Segunda División A.

En un comunicado, el alcalde ha anunciado que envía este lunes una carta a Espadaler sobre los altercados al final del partido, que ganó el Llagostera logrando el puesto en Segunda A, por "la actitud mostrada por los Mossos, que actuaron tarde y mal agrediendo a aficionados del Nàstic".

"Esta no es la actitud que se supone que ha de demostrar la policía, que debería haber calmado los ánimos en lugar de reaccionar tarde, cuando ya se estaban produciendo agresiones entre aficionados, y con una violencia gratuita", ha añadido Ballesteros.

En declaraciones a los medios tras una rueda de prensa de la Comisión Gestora del PSC, que preside Ballesteros, ha añadido que una parte de la afición del Llagostera evidenció una actitud lamentable dedicando "peinetas y hasta mostrando el culo" a los aficionados del Nàstic.

Además, ha precisado que los Mossos tardaron "entre seis y ocho minutos" en intervenir, lo que supuso que aficionados del Llagostera agredieran a una quincena de seguidores del Nàstic sin que, en un primer momento, interviniera la policía catalana.

"No puedo entender ni como alcalde ni como aficionado que no intervinieran para separar a las dos aficiones. No es una pataleta por haber perdido, fue un espectáculo absolutamente impresentable", ha zanjado Ballesteros.

Asimismo, ha explicado que pedirán a los aficionados y a los medios presentes que aporten las imágenes que realizaron durante los incidentes porque avalarán sus tesis, ha pronosticado.

Xavier tarrés

En declaraciones a Europa Press, el teniente de alcalde Xavier Tarrés ha valorado que, pese al ambiente de tensión entre las dos aficiones, que fue en aumento a lo largo del partido y que al final "cogió temperatura", los Mossos no estuvieron presentes durante el encuentro y reaccionaron muy tarde.

Una vez actuaron, cuando ya había incidentes, ha relatado Tarrés, usaron una violencia "considerable y gratuita", y de hecho, según su relato, el entrenador del Nàstic, Vicente Moreno, estuvo a punto de ser golpeado por los agentes y tuvo que identificarse para evitarlo.

"Pedíamos a la policía que estuviera presente durante el partido y no esperara a que se produjera el choque entre aficiones para actuar", ha insistido.