De este modo, el embalse de Entrepeñas ha perdido nueve hectómetros y se queda con 293 de los 835 que puede almacenar, mientras que el de Buendía ha perdido también nueve hectómetros y almacena 455 sobre una capacidad total de 1.639.

En cuanto al resto de los embalses de la provincia de Guadalajara, cuatro han bajado sus reservas, uno las ha aumentado y dos se han mantenido invariables. Así, el de Alcorlo ha perdido dos hectómetros y acumula 89, de los 180 que puede albergar; y el de Beleña ha perdido uno hectómetro y se queda con 40, de sus 53 embalsables.

De su lado, el de Palmaces ha perdido uno y se queda con 19, a 11 hectómetros de su máximo; el de La Tajera ha perdido otro hectómetro y alberga 30, de 59 que pude almacenar; y el de El Vado desciende dos hectómetros y se queda con 35, de los 56 que puede albergar.

De su lado, el embalse de Bolarque pasa de 25 hectómetros a 27, a cuatro de su máximo, mientras que el de Almoguera se mantiene invariable y se queda con 6, a uno de su máximo; el de Atance también mantiene sus reservas invariables con 14 hectómetros, de 35 que puede embalsar.

Molino de chincha

De otro lado, el embalse de Molino de Chincha, en la provincia de Cuenca, se mantiene invariable, por lo que se queda seis hectómetros, el máximo de su capacidad.