El secretario general del sindicato CTA, Francisco Moro, y el secretario general de CTA en la comarca del Bajo Guadalquivir en Córdoba, José Parras, han advertido este martes de la "explotación" y la "represión" que sufren en estos momentos los empleados en la campaña del ajo, que, según destacan, investiga la Fiscalía después de una denuncia del sindicato por la supuesta comisión de un delito contra los derechos de los trabajadores.

En declaraciones a los periodistas, Moro ha precisado que entre las situaciones que se viven en la citada campaña en algunas explotaciones agrarias entre La Guijarrosa y Santaella "existen centenares de trabajadores rumanos y africanos", de los que "la mayoría no están dados de alta en la Seguridad Social, cobran solo diez euros diarios y trabajan de sol a sol".

Al respecto, lamenta que el convenio por la campaña del ajo "se ha bajado un 14%", y en este caso, agrega, "los empresarios que tenían que estar pagando a 1,61 euros la caja, la pagan a 1,21 euros", al tiempo que critican las respuestas recibidas cuando informaban de sus derechos a los trabajadores, momento en el que se les acercaron los propietarios de las fincas y los amenazaron.

Asimismo, el secretario general de CTA en la comarca del Bajo Guadalquivir ha lamentado que la Inspección de Trabajo han interpuesto unas 140 denuncias, pero "dice que no pueden comprobar los hechos, porque siempre llegan tarde" a la hora de la inspección, motivo por el que pide "más interés" por su parte.