El abuelo y el padre acusados de abusos lo niegan y apuntan a una supuesta deuda tras la denuncia

El abuelo y el padre que estaban citados este martes en la Sección Primera de la Audiencia Provincial de Jaén como acusados de haber abusado sexualmente en Úbeda de una niña de tres años --nieta del primero e hija del segundo-- han negado los hechos y han apuntado a las malas relaciones que mantendría la madre de la pequeña con su exmarido y a una supuesta deuda que tendría contraída con su suegro como causas de la denuncia.

El abuelo y el padre que estaban citados este martes en la Sección Primera de la Audiencia Provincial de Jaén como acusados de haber abusado sexualmente en Úbeda de una niña de tres años —nieta del primero e hija del segundo— han negado los hechos y han apuntado a las malas relaciones que mantendría la madre de la pequeña con su exmarido y a una supuesta deuda que tendría contraída con su suegro como causas de la denuncia.

Así se desprende de los testimonios que ambos han prestado este martes en el transcurso de este juicio, en el que únicamente la acusación particular —ejercida por la madre de la supuesta víctima— culpa a ambos procesados de un delito continuado de abusos sexuales por el que solicita una pena de doce años de prisión para cada uno, ya que el Ministerio Fiscal pide la libre absolución de éstos al considerar que durante la instrucción de la causa no han podido acreditarse los extremos denunciados.

En su declaración, el abuelo ha indicado que la denuncia de la exmujer de su hijo y madre de la niña se produjo a raíz de que le reclamara a ésta a través de su abogado una supuesta deuda de "dos millones" que ésta tendría contraída con él después de que éste le prestara dinero.

De esta manera, ha afirmado que es "mentira" que alguna vez haya tocado a su nieta, a la que ha visto muy poco a lo largo de su vida, según ha relatado, dado que apenas tenía relación con la madre de ésta, a la que "si no la hubiera conocido, mejor", y las pocas ocasiones en las que la menor ha estado en su casa "ni entraba en la habitación en la que estaba", y "nunca la ha bañado" ni "la ha visto desnuda".

Por su parte, el padre de la pequeña ha confirmado que desde el Patronato de Servicios Sociales se hablaba de unos posibles abusos sexuales que habrían cometido tanto el abuelo de la niña como él, pero ha negado que los llevara a cabo, así como que realizara tocamientos a su hija o le hiciera fotos desnuda.

Respecto al comportamiento de su padre, este acusado ha indicado que "no tiene conocimiento" de que aquel cometiera abusos con su nieta y ha ratificado que su exmujer "mantenía una deuda" con su padre. También ha afirmado que cuando la niña estaba con él en el turno de visitas establecido a raíz del procedimiento de divorcio de su esposa "se iba llorando de su casa" cuando se tenía que marchar "porque no quería irse con su madre".

En esa línea, ha señalado que su ya exmujer "no se llevaba bien con él", y cree que "la denuncia se la ha puesto para hacerle daño", según ha concluido el padre, que lleva "19 meses lleva sin ver a su hija".

En el transcurso del juicio también ha declarado una hermana de la abuela paterna de la niña —cuñada del abuelo procesado—, que ha afirmado haber sido víctima de ciertos abusos sexuales por parte de dicho imputado cuando ella tenía "siete u ocho años", ya que entonces le pedía que "enseñara sus partes íntimas y a veces le tocaba", pero que cuando lo contó, "a los 14 años de edad", nadie "le hizo caso" y su hermana —mujer del procesado, que es 15 años mayor que esta testigo— la tachó de "loca".

La tía abuela de la niña ha relatado su experiencia porque, según ha defendido, aunque sabe que esos hechos "han prescrito", no quiere que su sobrina nieta "caiga en manos" de su abuelo paterno y "vuelva a ocurrir" un caso similar al suyo, si bien ha admitido que ella no ha sido "testigo" de los supuestos abusos que ahora se juzgan porque "no ha estado en contacto" con los imputados.

"informes de profesionales"

La acusación particular se basa en "informes de profesionales" —concretamente, de psicólogos y trabajadores sociales de la asociación Márgenes y Vínculos, así como de Puntos de Encuentro Familiar y de una psicóloga que "ha estado tratando a la menor durante un tiempo"— para fundamentar su acusación.

Además de la citada pena de doce años de cárcel, la acusación particular interesa también para el abuelo y el padre unas prohibiciones de aproximación y comunicación respecto a la menor, que actualmente tiene unos seis años de edad, así como que queden inhabilitados para ejercer la custodia y la patria potestad de ésta, y el pago de una indemnización.

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