La Consellería de Cultura ha destinado este año 350.000 euros para ayudas a la conservación y protección de los bienes inmuebles del patrimonio cultural de la Comunitat Valenciana, lo que supone un 75 por ciento más que el año pasado. La orden de ayudas ha sido dirigida a ayuntamientos y las fundaciones, asociaciones y entidades sin ánimo de lucro, con el objetivo de fomentar la investigación y la conservación del patrimonio cultural valenciano.

La directora general de Cultura, Marta Alonso, ha inaugurado este jueves, junto con el presidente de la Diputación de Castellón, Francisco Javier Moliner, y el alcalde de Betxí, Alfred Remolar, la intervención realizada el año pasado en el Palacio-Castillo de los Condes de Ariza de esta localidad que supone la renovación y conservación del inmueble.

La eliminación de elementos impropios del claustro renacentista de este palacio-castillo, declarado BIC en 1997, se inició el pasado año cofinanciada por la Conselleria de Educación, Cultura y Deporte a través de la orden de ayudas para la conservación y protección de los bienes inmuebles del patrimonio cultural de la Comunitat Valenciana que se concedieron en julio de 2013, así como por otras intervenciones que ascienden a una cantidad total de más de 32.000 euros.

Igualmente, ha contado también para su financiación con la participación, de la Conselleria de Educación, Cultura y Deporte, la Diputación de Castellón y el Ayuntamiento de Betxí.

Palacio de los ariza

El palacio de los Ariza de Betxí se levantó a finales del siglo XVI sobre una fortaleza medieval totalmente remodelada en el Renacimiento. Las excavaciones arqueológicas realizadas en años anteriores sacaron a la luz los restos de la anterior construcción defensiva medieval, que presentaba planta cuadrangular con tuvo cuatro torreones en las esquinas y foso alrededor. La Dirección General de Cultura colaboró en las excavaciones realizadas en 2008 con más de 12.000 euros.

Sin embargo, a pesar de las transformaciones sufridas a lo largo del tiempo es posible reconocer algunos de los elementos renacentistas del monumento, como el claustro, la portada principal y la puerta recayente al claustro.

La intervención realizada en 2013 constituye la primera fase de actuación en el Palacio-Castillo con el objetivo de identificar y eliminar los elementos impropios que impiden leer el claustro renacentista.

Además, se ha dotado al edificio de una instalación adecuada para recoger las aguas pluviales, reconduciendo las bajantes hacia el centro del claustro puesto que las existentes discurrían clavadas a las columnas de piedra del claustro, y se han embebido y anclado las nuevas a los muros del edificio, liberando así a la obra renacentista. Por último, se ha consolidado y protegido la cornisa de piedra renacentista que presentaba peligro de caída y filtraciones de agua por las juntas.