El vicesecretario de Coordinación Institucional de CDC, Lluís Corominas, ha dado por cerrada este jueves la crisis con el líder de UDC y secretario general de CiU, Josep Antoni Duran Lleida. Sin embargo, ha pedido a todos los dirigentes que integren la federación un compromiso total con la consulta.

"No sobra nadie, pero es un proceso y un momento que va más allá de las personas. Pedimos que quien nos represente tenga este compromiso personal y colectivo con lo que la federación decida cada momento", ha sostenido en rueda de prensa junto con el secretario de Organización de CDC, Josep Rull, tras una reunión extraordinaria de la Permanente.

Después de las críticas de Duran contra Rull, el secretario de Organización de CDC ha descartado sus declaraciones de que si dejaba de ser secretario general de CiU tenía que abandonar la portavocía del Congreso porque, a su juicio, en las declaraciones del martes del líder democristiano dejó claro que desvinculaba su reflexión del proceso.

El fin de semana trascendió que Duran meditaba dejar de ser el número de CiU, una decisión que podría hacer pública tras la proclamación de Felip VI. Sin embargo, aseguró que su posible marcha no estaba relacionada con la abstención en la ley que regula la abdicación del rey ni a la consulta soberanista, sino que se debe a la inacción del Gobierno central. En respuesta a Rull, afirmó que seguiría como portavoz en el Congreso pues Artur Mas no le había pedido que renunciara.

El secretario de Organización de CDC también ha manifestado su "respeto absoluto" por la decisión de Pere Navarro de dimitir como primer secretario de los socialistas catalanes y ha emplazado al PSC a aprovechar la nueva etapa que se abre para "reincorporarse" a la consulta soberanista.

"Emplazamos al PSC a que, en el contexto del debate interno, se reincorpore en el consenso del derecho a decidir y la consulta del 9 de noviembre", ha afirmado Rull. En su opinión, la ley de consultas que prepara el Parlament sería una buena vía para que el PSC expresara su "reincorporación" a la consulta del 9 de noviembre, pactada entre CiU, ERC, ICV-EUiA y CUP.